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La recuperación de tradiciones marca las fiestas de Legutio

Las cofradías o fiestas de Legutio comienzan hoy con el tradicional chupinazo, en una edición marcada por la recuperación de algunas tradiciones que ya se creían perdidas, como la tamborrada popular, o el mantenimiento y refuerzo de otras actividades recuperadas hace poco tiempo, como el homenaje a la ikurriña, o bertso-pelota, un curioso partido de pelota a mano. A pesar de la crisis, el Ayuntamiento ha decidido mantener el presupuesto y los actos.

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Mikel PASTOR |

Dicen que las tradiciones son el símbolo, las verdaderas señas de identidad de un pueblo, lo que lo hace diferente, propio. En Legutio, a orillas del enorme embalse de Urrunaga, han decidido seguir esta máxima al pie de letra, recuperando antiguas tradiciones y reforzando otras salvadas hace poco tiempo.

Es el caso de la tamborrada, como explica Estitxu Ibáñez de Gauna, delegada de Cultura de la localidad, «fue el acto principal de fiestas durante los años 80, llegando a congregar a gente de los pueblos colindantes». El envejecimiento de algunos integrantes, y la falta de apoyos hizo que los tambores acabaran guardándose hasta este año. El Ayuntamiento planteó recuperar los potentes sonidos del tambor y la respuesta ha sido «excelente». Unas 60 personas tomarán parte en este acto del viernes.

Un partido muy especial

No será la única actividad novedosa ne el programa de este año. En este caso, tampoco se trata de un estreno, si no de volver a apostar por un modelo que ha funcionado «a las mil maravillas» desde su implantación hace tres años: la bertso-pelota. Se trata de un partido de pelota a mano, pero con ciertos matices, ya que los botilleros son bertsolaris que transmiten las órdenes a sus pupilos a través de versos. Beñat Lizaso y Millan Lizaso serán los encargados de dirigir a los pelotaris profesionales Capellán y Martínez de Eulate, que se combinarán con dos pelotaris de Legutio en un partido a parejas que promete ser apasionante.

Otros actos realizados en años anteriores también tendrán su pequeño hueco en esta edición, como el homenaje a la ikurriña, que, como explica la propia Estitxu, «se puso en marcha a raíz de la ley de banderas, que obligaba a colgar la española en la balconada». En Legutio decidieron no colgar ninguna en la fachada, «y homenajear a la única que nos representa, a la ikurriña, durante las fiestas».

La lucha de los trabajadores de Laminaciones Arregi estará también muy presente en las fiestas. Los empleados de esta planta han decidido poner una txosna para recaudar fondos. «Nos explicaron su situación, nos dijeron que era crítica, y el Ayuntamiento no uso ninguna pega», explicó Ibáñez de Gauna al respecto.

en lucha

Varios trabajadores que luchan contra los despidos en Laminaciones Arregi han decidido instalar txosna para recaudar fondos. «Estamos con ellos» dicen desde el Gobierno municipal.

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