El grupo de ganaderos llevó a cabo una parodia en la entrada del centro comercial Carrefour de Barañain para explicar a los consumidores los abusos que las grandes cadenas de distribución, «principalmente las de capital francés y alemán», están llevando a cabo con el precio de la leche, entre los que destacaron «la ilegal venta a pérdidas», que está provocando «el cierre constante de las explotaciones ganaderas».

Según explicó Mikel Alzuart, responsable del sector lácteo, producir un litro de leche le cuesta al ganadero 0,439 euros, pero solo recibe 0,32, mientras, en el final de la cadena, el consumidor paga de media por un litro de leche 0,81 euros.

Por ello, señaló que «los márgenes entre el precio de destino y el precio de origen son un claro ejemplo del abuso que lleva a cabo la gran distribución con las personas productoras», al tiempo que denunciaba «la utilización de la leche como producto reclamo, que está ahogando aún más al sector lácteo en la ruina que viene padeciendo en los últimos años».

Ante esta situación, EHNE reclamó a Carrefour «un precio digno para la leche, un precio que cubra los costes de producción y que permita a los ganaderos y ganaderas de vacuno de leche continuar con su actividad» porque, de lo contrario, Euskal Herria «corre un alto riesgo de quedarse sin sector lácteo».

Frente a los precios que se están pagando por el precio de la leche, Alzuart recordó que los costes de producción «no hacen más que subir». Según explicó, actualmente el precio medio del pienso está en 0,32 euros el kilo y desde el año 2010 el incremento de los costes de producción ha sido constante.

«En 2010 el precio del pienso estaba en 228 euros la tonelada; en 2011 en 271 euros y en 2012 en 320. Entre 2010 y 2011 -dijo- la rentabilidad de las explotaciones de vacuno de leche ha descendido un 25% y en 2012 se prevé que la rentabilidad baje un 10% más. Por tanto, en dos años los ganaderos y ganaderas de vacuno de leche han perdido un 35% de rentabilidad».

Tras reclamar un cambio de rumbo en la Política Agraria Común (PAC) y exigir que se pongan en marcha los mecanismos necesarios para el control de los mercados y de la producción, EHNE rechazó la supresión de las cuotas lácteas que contempla la nueva PAC para el año 2015, al considerar que supondrá «una clara condena de muerte para el sector lácteo».