RUGIDOS ROJIBLANCOS
Tiempo de reflexión
Beñat ZARRABEITIA Periodista y socio del Athletic
La derrota en Anoeta ha dejado un poso muy preocupante en todo el entorno del Athletic. No ganar en un derbi puede entrar dentro de la lógica pero la imagen y facilidades ofrecidas por los leones en la segunda mitad son inquietantes. Los rojiblancos tiraron por la borda un partido que tenían controlado debido a sus problemas en la salida del balón, errores en defensa, una repetida continuación de pérdidas de balón, dificultad para una circulación fluida del balón y como consecuencia de ello desconexión con los jugadores de ataque.
Es tiempo de reflexión, autocrítica y reconversión. Algo a lo que no ayudan en nada situaciones como el desencuentro público de Bielsa y Llorente en Lezama. Sin embargo, no conviene perder ni la calma ni la perspectiva. El verano ha sido muy complicado y ha dejado una resaca que está siendo difícil de sobrellevar. Han pasado pocos meses desde que los leones asombrasen a Europa y en el plantel titular únicamente se ha producido la salida de Javi Martínez. Por tanto, la capacidad competitiva y el nivel del Athletic sigue siendo elevado. Hay que poner la maquinaria futbolística, física y mental a punto. En ese camino los dos próximos partidos, el de Praga y el nuevo derbi ante Osasuna, deben suponer un punto de inflexión antes de un parón de dos semanas que servirá para oxigenar y recuperar efectivos.
Es evidente que algunos futbolistas no pasan por su mejor momento y que Bielsa quizá debería plantearse algunos retoques tanto defensivos como ofensivos. Llegarán con la recuperación de efectivos, pero antes el once podría precisar de retoques. El trabajo en Lezama es clave para mejorar la salida y circulación de balón, así como para reducir las pérdidas. Jugadores como Ekiza o Ruiz de Galarreta no han desentonado durante los minutos que han gozado y son alternativas solventes. Una vez descartado invertir en el mercado -aunque todo apunta de que a no mucho tardar los nombres de Monreal y, sobre todo, Beñat volverán a aparecer-, en caso de que el rosarino no encuentre la pieza o tecla de su gusto, siempre podrá recurrir a algún cachorro de las inferiores.
Lejos de alarmismos y rehusando de cargar el ambiente, el Athletic tiene mucho trabajo por delante para subsanar las carencias que ha mostrado pero también un amplísimo margen de mejora y potencial. Por tanto, sabiendo que las primeras 25 jornadas son de posicionamiento, es de esperar que el equipo crezca en positivo. Hay que convertir la preocupación en energía positiva porque estos futbolistas y técnicos son los mismos que han hecho vivir al club algunos de los momentos más importantes de su historia. Y eso, como el jugar a fútbol, no se olvida. Con paciencia, exigencia, trabajo y responsabilidad, la nave rojiblanca saldrá adelante.