ELA denunció ayer que los presupuestos del Estado español para 2013 «traerán un grave deterioro de los derechos laborales y sociales». Crearán más paro y desigualdad social y remarcó que «imponen la prioridad del pago de la deuda. Al Gobierno español del PP le importa un bledo el paro y la economía real. Cada vez es más evidente que quienes gobiernan no representan los intereses de la mayoría de la población», según indicó su secretario general, Adolfo Muñoz, Txiki.

Muñoz compareció junto a Idoia Intxaurbe y Mikel Noval. Aseguró que el paro es el principal problema, pero los presupuestos generales de 2013 no lo atienden. «El Gobierno español en manos del PP, pero antes en manos del PSOE», precisó, «mantiene su obsesión en el déficit. Así modificaron la Constitución española en lo que fue un golpe antisocial». De esta manera, la prioridad se pone «en pagar la deuda en vez de en ayudar a la población más necesitada». Indicó que en los presupuestos del 2013 se pagan unos intereses por la deuda de 38.590 millones «que van a parar a manos de los especuladores».

El líder de ELA aseguró que no se puede analizar la situación económica actual «sin hablar de la corrupción» por «la complicidad entre el poder político y el económico». Recordó que «se está haciendo un trasvase ingente, de miles de millones de euros, de dinero público al poder financiero con cobertura política por parte de los grandes partidos», bajo el supuesto objetivo de que fluya el crédito, «pero saben que no va a haber. Los grandes partidos -expresó- están de acuerdo en que sea así, pero esto no se puede entender sin que haya elementos de corrupción».

En este caso, recordó que en la denuncia que presentaron ante el Supremo por los fuertes recortes se advierte de que «el dinero que presta la banca a los partidos políticos no se devuelve, algo que no pasa con los ciudadanos, que cuando no pueden pagar la hipoteca se les desahucia».

Estas operaciones se realizan porque el poder financiero sabe que «los políticos tomarán las decisiones que le interesan. Así está ocurriendo». Por lo que añadió que «mientras el poder financiero escriba los discursos y maneje la práctica política de los partidos en el Estado español, esto no tiene solución».

ELA tachó de «ilegítima» la deuda que se está generando y que supone un gran lastre y dijo que habrá recorte de las pensiones y se ampliará la edad de jubilación.

Por todo ello, rechaza las medidas aprobadas por el Gobierno español «porque van a generar un grave deterioro de los derechos laborales y sociales». Porque «todo ese dinero que se le da a la banca se nos quita del gasto social, de las prestaciones por el desempleo y por pensiones».