Comienza hoy a preparar el partido contra el Betis
Decididos a curar una enfermedad extendida
La Real quiere apoyarse en el buen juego desplegado en el derbi para cortar su mala racha como visitante.
Asier AIESTARAN
Aunque la golosa victoria sobre el Athletic del pasado derbi sigue dando que hablar en Donostia, la Real comienza hoy a las 10.00 a preparar su próximo partido, la visita al Betis el sábado a las 22.00. Una nueva salida, la cuarta de la temporada, que volverá a poner en primer plano los problemas del equipo txuriurdin fuera de casa. Un quebradero de cabeza que, no obstante, no es ninguna rareza entre los equipos de Primera.
Basta echar un vistazo a los números que han dejado las seis primeras jornadas de Liga, en las que todos los equipos han disputado tres encuentros en casa y otros tres fuera, para darse cuenta de que a la inmensa mayoría de equipos le cuesta mucho más sumar como visitante. Una tendencia que ya se pudo comprobar con claridad en anteriores temporadas y que en la presente campaña no parece variar en absoluto.
Mientras que todos los equipos de Primera excepto el Espanyol han logrado ya alguna victoria en su feudo, son once las escuadras que todavía no conocen el triunfo como foráneo. Y de esos once conjuntos, seis no han sumado ni un punto lejos de casa, la Real entre ellos. De hecho, los donostiarras son el mejor ejemplo de esa bipolaridad, sumando todos los puntos puestos en juego en casa y ninguno lejos de Anoeta.
«Con la misma intensidad»
Conscientes de que el próximo reto pasa por mejorar esa faceta, Dani Estrada y Asier Illarramendi se conjuraban en una entrevista concedida a Real Sociedad TV para lograr los primeros puntos fuera de casa lo antes posible, a poder ser este sábado en el Benito Villamarín.
«Llevamos tiempo diciendo que en casa estamos fuertes, y sumar en esos partidos es importante. Ahora ya sabemos lo que tenemos que mejorar, que son los desplazamientos en los que no hemos estado tan bien hasta ahora, y a ver si este sábado contra el Betis podemos sumar algo», pedía el lateral derecho de Zarautz en ese sentido.
En similares términos se expresaba Illarramendi. «En casa estamos fuertes y ahora hay que trasladar ese espíritu fuera de casa, empezando por el sábado en Sevilla. Será un partido complicado pero a ver si jugamos un buen partido y traemos los tres puntos», comentaba el centrocampista de Mutriku, que cuajó ante el Athletic una de sus mejores actuaciones.
Las razones de esa doble cara pueden ser variadas y complejas de detectar, en algunos casos, pero Dani Estrada daba algunas claves de cara a cortar la racha negativa. «Creo que el equipo mostró una imagen muy buena (contra el Athletic) y que esa es la línea a seguir para los partidos fuera de casa. Tenemos que jugar con esa misma intensidad, con las mismas ganas, y haciendo nuestro juego cuando tengamos el balón».
Un partido, el del Villamarín, que inevitablemente trae a la mente el del año pasado en ese mismo escenario, cuando Philippe Montanier llegaba a la cita muy cuestionado por afición y parte de la Directiva, y un gol de Iñigo Martínez desde el centro del campo en el último minuto sirvió para dar la vuelta a un partido que se puso cuesta arriba en la segunda mitad.
Más retrasado
En el plano personal, Estrada e Illarramendi fueron dos de los destacados del derbi. El centrocampista reconoció que «es verdad que jugué un poco más atrás. Ellos jugaban con dos medias puntas y defensivamente sí que me retrasé un poco para ayudarle a Markel. La verdad es que nos salió bastante bien, eso le dio más libertad a Zurutuza, que estuvo muy bien».
El lateral derecho, por su parte, admitía sonriente que «la soltura y el intentar hacer más cosas la da la confianza y el jugar más partidos. Yo personalmente estoy jugando todo y me estoy sintiendo muy a gusto».
Claudio Bravo comenzó ayer la recuperación de la fractura del radio que sufrió el miércoles pasado. El portero chileno estuvo en Zubieta para sustituir el vendaje y aprovechó la ocasión para agradecer todas las muestras de cariño recibidas, al tiempo que mostró su confianza en Eñaut Zubikarai.
Bravo admitió que se encuentra «bastante bien, más tranquilo, con menos dolor también», y dijo que la lesión se debió a «un accidente, una jugada natural dentro de lo que hacemos día a día». El guardameta prefiere no ponerse plazos porque «siempre me dicen una cantidad de tiempo y siempre me recupero antes de ese plazo». Ahora, su objetivo no es otro que recuperarse bien «para evitar problemas en el futuro, no quiero sentirme incómodo o tener dolores».
El chileno quiso dar las gracias «a todo el mundo», porque «se agradece, ya sean los aficionados, los amigos, los compañeros... Es bonito cuando la gente está preocupada por ti». Y sobre Zubikarai añadió que «tengo mucha confianza en él, todos sabemos lo que es capaz de rendir y la confianza en el grupo es plena». A.A.
El jueves se realizará el cargo en cuenta de la tercera fracción de 2012 a los abonados de la Real que están acogidos al pago por domiciliación bancaria. Los no acogidos al sistema de cobro bancario recibirán en sus domicilios el aviso con el que deberán ir a una oficina de Kutxa.
La plantilla completará cuatro entrenamientos antes de jugar el sábado. Tanto hoy como mañana el equipo entrenará a las 10.00, mientras que el jueves y viernes lo harán una hora más tarde. Las sesiones de mañana y pasado serán a puerta cerrada.
La noticia en el Betis ayer fue que el lateral derecho Javier Chica estará de baja entre cuatro y seis semanas, ya que tendrá que pasar por el quirófano para corregir una lesión de rodilla que lo mantiene inactivo desde el 25 de agosto. Su presencia frente a la Real ya estaba descartada.