Galicia abre una reñida campaña en la que el PP se juega la mayoría
Xavier BARROS (Efe) | SANTIAGO
En la campaña para las elecciones gallegas, que comenzó la pasada madrugada, está en juego la pugna entre el PPdG, que aspira a revalidar su mayoría absoluta, y el PSdeG, BNG y otras formaciones que quieren impedir una nueva victoria de Alberto Nuñez Feijóo (PP).
En las dos semanas de campaña, PPdeG y las otras formaciones buscan convencer a un electorado indeciso que puede marcar la diferencia de votos necesaria para la victoria de uno u otro.
Los sondeos divulgados en los últimos meses apuntan a que cuatro de cada seis electores se muestran indecisos, aunque el PPdeG aventaja ampliamente en intención de voto a las demás formaciones, y tiene posibilidades de renovar la mayoría absoluta.
También puede ser decisivo el voto de los más de 397.000 gallegos que viven en el exterior y que pueden ejercer su derecho, lo que ha llevado a las dos principales formaciones -PPdeG y PSdeG- a intensificar su campaña entre ese colectivo.
En la campaña estarán presentes figuras mediáticas como el histórico dirigente nacionalista gallego Xosé Manuel Beiras, al que algunos sondeos pronostican amplias posibilidades de volver a ser diputado en el Parlamento o un nuevo partido -Sociedad Civil y Democracia- fundado por el exbanquero Mario Conde, que aspira también a obtener al menos un escaño.
Algunos dirigentes de la oposición y comentaristas políticos han subrayado que las elecciones gallegas «constituyen un test», no solo para las políticas de austeridad aplicadas por Feijóo, sino también para el Gobierno español y su presidente y líder del PP, el también gallego Mariano Rajoy, que tiene previsto viajar participar en la campaña.
La precampaña ha estado marcada por cierta controversia con el anuncio de la petrolera mexicana Pemex de un acuerdo para construir dos hoteles flotantes en los astilleros gallegos y la «Operación Pokemon».