Maite SOROA | msoroa@gara.net
España una, amén
La Conferencia Episcopal Española asomaba la patita (¿perciben el sarcasmo?) y la caverna mediática asentía y aplaudía con las orejas.
«La Razón» llevaba a primera página la voz de los obispos, quienes «llaman a `preservar el bien de la unidad' ante el órdago independentista de Mas», y editorializaba al respecto, titulando «La oportuna voz de los obispos». Una creía que esos señores se dedicaban a la salvación de las almas, no de la unidad de España, pero se ve que en horas libres le dan a otros palos, hasta el punto de que su dedicación a salvar la patria es para ellos tradición. Destacaba la o el editorialista que la Iglesia «recuerda a los nacionalistas que la unidad de España es un bien a preservar». Pues mi vecina, aunque no es obispo ni puede serlo, opina todo lo contrario. Terminaba el editorial haciendo un llamamiento a los votantes, no porque pretendiera influir en el voto de nadie, qué va, sino porque la voluntad divina así lo dispone, se siente: «la Iglesia reitera unas observaciones muy precisas que los votantes católicos, especialmente los catalanes, deben tener presentes a la hora de elegir democráticamente a sus representantes políticos». Solo le faltaba decir que los que no voten al PP no son demócratas. Y menos católicos, claro.
«Abc» no destacaba tanto el llamamiento de los obispos, y venía a decir algo así como que «no es que lo digamos nosotros, ¿eh?». Concretamente: «Los obispos alertan contra el riesgo de la `desintegración unilateral' de España». Ah, bueno, si lo dicen los obispos...
«El Mundo» no prestaba excesiva atención a la declaración episcopal. Bajo el título «Los obispos, por la unidad de España», afirmaba que «No llegan a calificar la unidad de España como sagrada, pero casi», en una información correcta.
Más dudosa parecía la concerniente a la campaña electoral en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, en la que ese diario aseguraba que Laura Mintegi «barniza su discurso independentista con un toque ecologista y renovador». Y en páginas interiores había más barniz: «EH Bildu hará una campaña identitaria, sí, pero también enarbolará un discurso barnizado de la indignación que ha sacado a la calle a miles de personas en el último año y que pretende atraer al electorado más joven». Que una sepa, los componentes de esa coalición siempre han mostrado posturas claras respecto al ecologismo y a la cuestión social. Sin ir más lejos, se adhirieron a la huelga general del 26 de setiembre, por lo que no necesitan «barnices».