Hat-trick de Vettel
Xabier ALZELAI | Ingeniero de pruebas
Tres victorias en los tres últimos GPs. Es un hat-trick que puede ser la clave de otro hat-trick: el de los tres campeonatos seguidos. En lo que va de gira asiática ha quedado claro que la velocidad de los RedBull no es humo. Son rápidos el viernes, sábado y domingo. Han encontrado eso que les faltaba para equilibrar el coche. Todo el mundo habla del doble DRS; seguro que ganan algo con el doble DRS, pero la ventaja es marginal. La verdadera ganancia proviene probablemente de una combinación de ingeniosas razones.
Con Hamilton prácticamente fuera de la lucha, todo indica a que el mundial es ya cosa de dos. Para Alonso ya no es suficiente solo con ser consistente. A partir de ahora se trata de velocidad pura, va a tener que ser muy rápido para batir a Vettel. Ferrari tiene que encontrar la manera de ganar al menos uno de los cuatro GPs que quedan, o puede que se les escape otro título. Les va a resultar complicado, pues parece que RedBull ha alcanzado el nivel de superioridad de la que gozaba en 2011.
Pacere que al Ferrari le faltan 3 o 4 décimas en calificación para luchar de tú a tú con los RedBull en este momento. Todo el mundo sabe que su principal punto débil es la calificación, `solo' necesitan encontrar el ritmo los sábados.
Porque según lo visto este año, hace falta salir al menos de la primera fila para optar a ganar carreras este año. De no ser así, hace falta muchísima suerte; pero probablemente Alonso sabe que no le queda mucho saldo de suerte para este año. 9 de 16 carreras se han ganado desde la pole esta temporada. Solo tres se han ganado saliendo de la P2 y una desde la P3. Solo dos carreras se han ganado saliendo desde más atrás: las caóticas carreras de Malasia y Valencia, ambas ganadas por Alonso.
Tanto Alonso como Vettel han tenido también sus dósis de mala suerte. El piloto asturiano tuvo que retirarse en la primera vuelta en Suzuka; en Spa fue víctima de una embestida de Romain Grosjean. Vettel tampoco se ha librado, teniendo que abandonar más de una vez debido a fallo del alternador. La suerte ya ha influído tanto en una dirección como en otra, por tanto lo más probable es que la velocidad, y no el azar ni la fiabilidad, sea lo que decida el campeonato.
El Ferrari sigue siendo de los más rápidos en cuanto a ritmo de carrera respecta. Los RedBull encabezaron la tabla este viernes; pero si leemos esos tiempos entre líneas, vemos que el Ferrari es el coche más rápido en tandas que representan ritmo de carrera, seguido muy de cerca por McLaren y RedBull, con Sauber pisándoles los talones. Lo cual me hace pensar que vamos a entretenernos mucho en lo que resta de temporada -cuatro pruebas-.
Por supuesto los neumáticos van a seguir jugando un papel decisivo. Desde que Pirelli está en la F1, las carreras son un desafío de gestión de neumáticos. Una de las claves está en hacer que funcionen de tal manera que la degradación perjudique el ritmo, de manera que el aumento de ritmo sea progresivo de stint a stint, mientras el coche va perdiendo kilos. Hay coches que desgastan de forma más agresiva el neumático que otros. Un caso evidente de problemas de desgaste es el de Mercedes, cuyo ritmo el viernes era degresivo, a pesar de la pérdida de peso. Hay pilotos como Petrov en los que también se puede observar un efecto similar; en este caso probablemente la causa está entre en volante y el asiento.
RedBull goza de una pequeña ventaja en calificación, sin ser inalcanzables, pero que resulta vital para ganar carreras. Pero si hay alguien ahí fuera que pueda igualar o incluso superar ese nivel, ese alguien se llama Ferrari. Sin olvidarnos de McLaren, que pueden jugar un papel decisivo a la hora de decidir el campeonato. No están siendo muy consistentes en las últimas carreras, pero quedan circuitos donde pueden volver a mostrar su velocidad y pelear por victorias. Nada está decidido, nos espera un emocionante y bonito final de temporada. Las dos máquinas más veloces en manos de los dos mejores pilotos del momento. Y la suerte ya no cuenta.