Disparan «por error» y llevan a París al presidente mauritano, amenazado por Al Qaeda
Aunque la versión oficial asegura que se encuentra fuera de peligro, el presidente de Mauritania, Mohamed uld Abdel Aziz, fue trasladado ayer a París después de que el sábado recibiera «por error» uno o varios disparos de un soldado. Había sido amenazado de muerte por Al Qaeda.
GARA | NUAKCHOT
La versión oficial ofrecida por el Gobierno afirma que el presidente de Mauritania, el excoronel golpista Mohamed uld Abdel Aziz, fue tiroteado «por error» por un militar de su propia escolta cuando regresaba a la capital, Nuakchot y que su estado de salud es «bueno», ya que afirma que entró por su propio pie en el hospital. El propio mandatario, que ha recibido amenazas de muerte de Al Qaeda del Magreb Islámico (AQMI), trató de corroborar esa tesis tranquilizadora apareciendo en la televisión pública de su país, con semblante cansado pero sereno, para asegurar que «las cosas van bien» y «no hay razón para inquietarse».
Sin embargo, otro medios electrónicos locales a los que hacía referencia Efe, señalaban que Abdel Aziz habría recibido varios disparos, lo que cuestionaría la versión de una posible «bala perdida» y que fue intervenido quirúrgicamente durante horas. La televisión tuvo cuidado de no mostrar más que la cara y la parte superior del torso del presidente, cubierto por una sábana.
Su traslado en un avión ambulancia a París parece indicar que su estado es grave.
Abdel Aziz, que llegó al poder en 2008 tras un golpe de Estado, cambió pronto el uniforme de coronel por el traje civil y solo quince meses después, como suele ser tradicional, ganó las elecciones organizadas para legitimarse en el poder, gracias sobre todo a la unidad de la oposición y de sus líderes históricos, el izquierdista Ahmed uld Dadah y el harratín (descendientes de esclavos) Mesud uld Boulkheir. Un sector de la oposición exige su partida al cuestionar sus credenciales democráticas.
Combatiendo al salafismo
Desde entonces no le ha temblado el pulso a la hora de combatir el salafismo en el Sahel y concretamente a AQMI, que cuenta con bases más o menos estables en el vecino Mali, muy cerca de la frontera con Mauritania. De hecho, en 2011 no dudó en ordenar varios ataques de su Ejército dentro del territorio maliense contra esta organización, que, por su parte, ha realizado varias incursiones en territorio mauritano, donde ha llevado a cabo varios secuestros. Claro que AQMI le ha mostrado que la relación de fuerzas no siempre juega a su favor y le ha obligado a negociar la excarcelación de prominentes líderes salafistas encarcelados en Mauritania a cambio de la liberación de algunos rehenes.
En cualquier caso, el Ejecutivo mauritano no se ha mostrado dispuesto a participar en una eventual intervención en Mali para recuperar el control de Azawad, ahora en manos de AQMI.
«Quiero tranquilizar a todos los ciudadanos. La operación de la pasada noche fue un éxito gracias a la eficacia del equipo médico», señaló Abdel Aziz por la televisión pública antes de partir hacia París. Explicó que el «incidente» fue cometido «por error por una unidad del Ejército en una carretera sin asfaltar cerca de Touela».