La palabra lunes no es de las que cuenta con más adeptos. El mal cuerpo, la sensación de bajón, la pereza... parecen adueñarse de muchos el primer día de la semana. Un tópico que el Barakaldo viene cargándose las últimas semanas. Desde el presidente hasta el utillero, los gualdinegros le han cogido el gusto a despertar los lunes con una sonrisa de oreja a oreja.

Así ha sido durante tres semanas consecutivas. Tres jornadas que han permitido al equipo fabril sumar nueve puntos de tacada y acercarse a la parte noble de la clasificación, a solo tres puntos del cuarto puesto. Nada que ver con lo que se presupone a un recién ascendido, tópico con el que el Barakaldo -aunque no es una excepción, como atestigua la trayectoria de Tudelano o Peña Sport- también parece dispuesto a acabar. Aunque los pies sigan anclados al suelo y la referencia en la que se fijan los vizcainos no sea la distancia respecto a los puestos de play-off, sino el colchón sobre los puestos de descenso, que alcanza ya los cinco puntos. «Nosotros lo tenemos muy muy claro -asegura Iñaki Zurimendi-, el equipo está hecho para intentar consolidarnos en la categoría».

Algo en lo que confía plenamente -«aunque todavía nos tocará sufrir», advierte-, vista la evolución de un equipo al que le costó arrancar, pero que incluso en esas primeras jornadas ya hacía suyas las señas de identidad que exige el técnico de Alonsotegi. «El equipo está en la idea de currelar, de apretar, de presionar, de estar intensos...; es un equipo que se vacía en cada partido. También lo hacía al principio, pero de la misma manera que cuando nosotros nos hemos adelantado hemos sido superfiables y no nos han remontado, nosotros tampoco hemos sido capaces de remontar cuando el marcador se nos ha puesto en contra», explica.

Algo que tiene mucho que ver con ese «derroche de esfuerzo que realiza el equipo en cada partido. Es muy trabajador, muy solidario, supergenerosísimo..., no se le puede pedir más. Lógicamente, la categoría requiere una exigencia importante y si además el equipo realiza un esfuerzo tan generoso, si en un momento dado el rival se te adelanta, cuesta más reponerse y ese esfuerzo que has hecho va pasando factura».

Un esfuerzo que, de todos modos, el Barakaldo también exige a su rival. «Como bien dice un compañero mío que ahora mismo es líder, `para ganar a estos hay que correr mucho'», recuerda Zurimendi, en referencia a las declaraciones de Natxo González tras la victoria por la mínima del Deportivo Alavés frente al Barakaldo en la primera jornada de Liga.

Solidez

Y es que solo cuatro de los ocho equipos que se han enfrentado al cuadro fabril han sido capaces de anotar gol y en ningún caso más de uno. Una seguridad defensiva -es el equipo menos goleado de la categoría, junto a Alavés y Amorebieta-, a la que el técnico gualdinegro siempre ha concedido muchísima importancia. «No solo para el Barakaldo, para cualquier equipo y en cualquier categoría. Yo parto de que cualquier equipo se construye desde una base sólida. Luego hay que crecer y mejorar, pero en ese aspecto, el equipo ha estado bien desde el principio, al margen de lo que le haya costado obtener buenos resultados. Lo más importante, además, es que para ser sólidos, tiene que serlo todo el equipo y en nuestro caso se da, porque nuestra delantera ejerce un trabajo de presión importantísimo, son generosísimos. No es que seamos un equipo que juega atrás, al contrario, jugamos muy adelantados y ejercemos una presión arriba muy alta. Eso conlleva un gran esfuerzo, que los jugadores no eluden, pero que a veces pasa factura, como cuando el rival se adelanta en el marcador y luego cuesta más», insiste. Por eso, en un equipo «con muchas más virtudes que defectos», el aspecto en el que intentará mejorar Zurimendi en las próximas semanas pasa por «intentar encontrar más pausa cuando el partido lo requiere, jugar a veces más despacio... Aunque tampoco somos un equipo para especular. Por eso hemos mantenido la misma línea: presión, ser intensos, que el contrario tenga dificultades...».

Y el resultado no es nada malo aunque, con apenas una quinta parte de la temporada consumida, todavía sea pronto para saber si el Barakaldo será capaz de mantener esta línea a lo largo de todo el curso. «Yo creo que al equipo le va a tocar sufrir -asume con sinceridad el míster gualdinegro- y creo que todos somos conscientes. Pero dentro de ese sufrimiento intentaremos estar lo más holgados posible y creo que eso sí lo podemos conseguir porque ya estamos demostrando que somos capaces de competir con cualquiera. Pero tenemos claro que nuestra pelea va a ser diaria y que, como todos los equipos que tienen como objetivo mantener la categoría, tendremos altibajos. Lo bueno es que estamos preparados para afrontarlo, si vienen mal dadas veo al equipo capaz de superarlo y volver a entrar en una dinámica positiva como está haciendo ahora».

Y es que el Barakaldo, y en eso sí cumple el tópico de los equipos modestos y trabajadores, «es un equipo muy esforzado, muy solidario y muy generoso -insiste Iñaki Zurimendi-. Y esos son valores que, en Segunda B, además de la calidad, se notan mucho. El equipo que los tenga será muy difícil de batir, sea cual sea el rival».

La semana

Artilleros. Los dos goles que anotó en Tajonar permiten a Guzmán encabezar en solitario la tabla de realizadores con cuatro dianas. El jugador del Alavés está secundado por un amplio pelotón de futbolistas con tres goles, entre los que se encuentran Ardanaz (Izarra), Arruabarrena (Eibar), Larreategi (Amorebieta) y Eizagirre (Lleida).

Incidente. El autobús del Teruel sufrió una pedrada cuando abandonaba Eibar tras el encuentro de Ipurua. Aunque todo apunta a la gamberrada de un grupo de menores, sin relación con el propio partido, el Eibar emitió ayer una nota en la que mostraba su «más enérgica repulsa por el lamentable incidente». El club armero destaca que «este tipo de actos no representan en absoluto ni a la institución ni a la ciudad de Eibar» y ofrece sus «más sinceras disculpas» al club maño.

Encuentro. El sábado se celebró el XVII Encuentro de la Asociación de Veteranos del Barakaldo. Entre otros actos, se homenajeó a tres exjugadores gualdinegros (Jesús Vega «Polo», Santos Muro y Tomás Regúlez), así como al aficionado Eliseo Molinonuevo por su dedicación al club fabril.

Copa. Alavés y Eibar afrontan mañana la tercera eliminatoria copera. El cuadro albiazul parte hoy mismo rumbo a Valencia, donde entrenará por la tarde y donde mañana le espera un Huracán Valencia que colocará una grada supletoria en su campo para dar cabida a otros 2.000 espectadores. El Eibar, que este mediodía realizará la foto oficial del primer equipo, recibe al Arroyo en Ipurua.

Reinicio. El LemoaBerri, que toma el testigo del Lemona, desaparecido a la conclusión de la pasada temporada, en la localidad vizcaina, comenzó ayer su andadura en Tercera Regional. Con mal pie, porque cayó ante la Ikastola Larramendi.

Destituciones. Kiko Ramírez se convierte en el tercer técnico destituido en Segunda B. Javier Salamero toma su testigo al frente del Nástic. Anteriormente ya habían sido cesados Julio Cardozo (UCAM Murcia) y Hristo Vidakovic (Betis B).