Los vecinos de los inmuebles afectados por la explosión provocada en un edificio de viviendas de Hondarribia opinan que el presunto responsable de la deflagración tenía la «intencionalidad de originar daño y muerte». Esta persona, que reconoció haber provocado la explosión que tuvo lugar a las 6.00 del miércoles en un segundo piso de la calle Ubilla, en el casco histórico, ingresó la noche del jueves en la cárcel de Martutene.

Unos cuarenta vecinos fueron desalojados tras el suceso y pasaron la noche fuera de sus hogares como medida de precaución, aunque el Ayuntamiento precisó que todas las familias, salvo tres, regresaron el jueves a sus hogares.

El presunto autor de la explosión, que se entregó sobre las 23.10 del miércoles en la comisaría de la Policía autonómica en Irun, adonde acudió acompañado de su abogado, era el propietario de la vivienda y admitió haber provocado la explosión arguyendo «desavenencias con la constructora», según Lakua. Los vecinos afectados expusieron «su total repulsa» y anunciaron que adoptarán «todas las medidas» para que el detenido «asuma todas las responsabilidades que de tal actuación se deriven».