Un incendio desatado por razones desconocidas en un taller para discapacitados físicos y síquicos de Cáritas en la localidad alemana de Titisee-Neustadt dejó ayer 14 muertos y 7 heridos. Un portavoz policial destacó que la rápida actuación de los bomberos evitó un mayor número de víctimas en una operación de rescate calificada de «dramática y complicada».

El centro se dedicaba a trabajos en madera y metal y a sistemas electrotécnicos que eran realizados por los discapacitados bajo la supervisión de monitores especializados.