A 48 horas del derbi
Silva: «No se trata de una final, pero sí es urgente ganar»
El centrocampista chileno se ha adaptado perfectamente «a lo que el técnico quería» y desea quedarse en Iruñea, aunque todavía no ha hablado con el club.
Natxo MATXIN
Pese a llegar en el mercado invernal y de una liga muy distinta como la chilena, Francisco «Gato» Silva ha encajado como un guante en el esquema de Mendilibar. Centrocampista de ida y vuelta, algo que hacía mucho tiempo necesitaba el equipo, el futbolista quiere colaborar a la salvación de la escuadra navarra para hacer méritos y quedarse en Iruñea, algo que parece más que probable.
El director deportivo del club rojillo, Ángel Martín González, ya lo confirmó en una entrevista a un medio chileno, aunque el jugador prefiere ser cauto al respecto. «Por ahora no me han dicho nada, estamos centrados en la salvación. Después se verá si sigo o no, pero está claro que quiero quedarme, para eso vine», se postuló el volante defensivo sudamericano.
Mejor si lo hace compitiendo en Primera, que es el objetivo a pelear en las siete jornadas que restan. La primera piedra a colocar en esa meta es ganar este próximo domingo en un encuentro que Silva ya es consciente de que es especial. «Sé que es un derbi, como le llaman ustedes aquí, al que seguramente va a venir mucha gente de ellos, el campo va a estar lleno, así que esperamos que sea un gran partido a favor de nosotros», auguró el futbolista.
Aunque la Real «no asusta», sí que impone mucho respeto el gran momento de forma que vive. «Hay que estar muy atentos a lo que hacen ellos, creo que juegan bastante bien, vienen con muchos triunfos seguidos y con una confianza tremenda, así que va a ser un rival muy complicado», advirtió.
Adaptarse a la situación
Puestos a calificar el choque, Silva no lo consideró «una final porque quedan bastantes partidos», pero sí que lo catalogó como «un partido muy importante, sobre todo porque en casa tenemos que ganar sí o sí para conseguir la salvación de este año. Necesitamos con urgencia los puntos y, para ello, hay que salir desde el minuto 1 hasta el 90 con la mayor intensidad posible», aseguró.
Solamente en uno de sus primeros equipos Silva vivió una situación similar -en Universidad Católica siempre se pelea por el título-, pero ya sabía a lo que venía cuando decidió fichar por Osasuna. «Para tratar de encarar este tipo de situaciones hay que llevarlas bien anímicamente. Cuando llegué estábamos en descenso directo y ahora estamos mejor. Hay que adaptarse y salir adelante», propugnó el chileno. Y él lo ha hecho, jugando tanto en el doble pivote, como algo más adelantado, aunque reconoció sentirse más a gusto en la primera posición, su originaria.
Silva admitió sentirse integrado «a lo que es el equipo y la ciudad» tras la primera incertidumbre «de no saber a lo que me iba a enfrentar, cómo son los compañeros o el trabajo. Me he adaptado rápido a lo que el técnico quería».
El centrocampista chileno reconoció que todavía no había hablado con su compatriota Claudio Bravo, «aunque me imagino que antes del partido lo haremos. Sí que lo hice cuando llegué a Osasuna».
El vestuario rojillo tiene la receta, y nunca mejor dicho, para regresar a la senda del triunfo. Como ya ocurriese en pasadas temporadas, reunirse en torno a una mesa en las instalaciones de Tajonar suele ser precedente de futura victoria, un resultado que la escuadra navarra necesita como el comer.
Por eso, plantilla y jugadores se citaron ayer para rememorar antiguos capítulos y hacer piña junto a un buen plato con el que conjurarse en pos de la consecución de los tres puntos tan obligados para la salvación.
En esta oportunidad, el maestro de ceremonias fue el guardameta Ricardo, quien se encargó de cocinar una sabrosa paella, que fue degustada en un ambiente distendido y de camaradería rojilla. N.M.
Creó cierta alarma entre los asistentes al entrenamiento matinal de ayer en Tajonar ver correr en solitario a Rubén y no participar de la sesión con el resto de compañeros. Sin embargo, la ausen- cia del central gallego se debió a una decisión técnica, ya que se optó por darle descanso, como se ha venido haciendo con otros futbolistas rojillos cargados de una gran cantidad de minutos.
En declaraciones sorprendentes a ETB, el presidente rojillo, Miguel Archanco, admitió que en la campaña 2006-07 -la del descenso de la Real- no hubo «acuerdo» con la escuadra txuri urdin. «Hubo un antes del partido, hubo una antesala del partido, incluso un descanso del partido y no se alcanzó un acuerdo, no por culpa de Osasuna», indicó.
