Sé que esta sección está dedicada a la opinión. Bien de personas que ocasionalmente denunciamos situaciones o hechos que consideramos injustos y que deben ser publicados o bien del grupo de periodistas que profesionalmente se dedican a ello. Yo hoy me tomo la libertad de utilizar una parte de estas páginas para hacer de alguna manera un homenaje . Un omenaldi.

A Mari. Mari Gerrikaetxeberria. Maritxu, como la conocemos en Basauri. Y lo hago en Iritzia porque quiero que lo lea. Porque tantos años de trabajo y compromiso, altruista, desinteresada, de segunda fila en la foto, bien merece unas líneas .

Las páginas de este diario ya le han puesto cara y nombre. Es una de las muchas que han participado en la campaña Irakurleok y que se dejó fotografiar como «lectora de»... Nola ez!

Le hizo ilusión cuando le propuse que fuera una de las que participara. Siempre ha estado en las fotos. Pero detrás. En segunda fila, o tercera, o cuarta. O tan atrás que su imagen se difuminaba y te tenía que explicar ella misma dónde estaba. Pero siempre estaba.

Escribo desde Basauri. Os he hablado de Mari. Mari Gerrikaetxeberria. Pero en cualquier rincón de Euskal Herria donde estéis leyendo esto, seguro que encontráis a la vuestra. Muxu handi bat, «neskatila»!

Somos lo que han sido. Serán lo que somos.