Nada entiendo, nada comprendo. No le encuentro sentido a nada. Cuanto más lejos la queremos más cerca estamos de ella. No te alejes tanto que tengo miedo a la soledad. En la hora de la muerte parece que quien muere solo ni siquiera muere.

Y no, no son los cocodrilos, es el puente el que me hace no querer cruzar para ir a verte.

Rodeados de basura, lo dice todo la encimera; la mierda no siempre está en el rincón.

Olvidados los héroes de ayer, hoy los mismos villanos son los que nos dicen que hoy es hoy. Y hoy no es hoy aunque ayer fuera mañana. De los viejos errores se aprende y de los nuevos -hasta viejos- nunca sabrás nada.

Todo va viento en popa, a toda vela -que diría el pirata-, mejor un DVD que un libro, así na hay que dar «fe de ratas». Y se recicla mejor. Entre un 80 y un 90 por cien. En la planta de Kambo, dicen, «zienportzien!» «Bon boin», a otra cosa Mari Loka.

Cual pastoral en descanso oval, Legazpia 2013. Déjale a Messi un pasillo y te mete de un chut seis o siete. Al que te quiera dar, ponle el ojete. Son las ganas de jugar las que hacen al juguete. Es como para volver a cagarme en la virgen ahora que Cáritas hace lo que los rojos prometen.

Solo espero estar equivocado y no contribuir a florecer el campo santo. Equivocarme por no ser parte del desastre. Rezar infieles ¡rezar! O no, no lo hagáis si no queréis, es inevitable fallecer por inanición, Los que estudiaron en la pública, eso sí, morirán de hambre. Cada uno a su nivel. Hay clases de luchas pero no se contempla la de clases. Y se prefiere al resto la de llenar las huchas. ¿Le metemos fuego a la Kutxa?

Vayamos por partes: ¿Vamos o volvemos? ¿Somos o seremos? ¿O solo nos creemos parte? Yo ya no sé ni qué pensar, como para pensar en lo que sé. Somos un no sé y un no contesta a parte iguales. Una gran meta de sentimientos residuales. Drama, dramón y tragedia. Piedra, papel y tijera. De hacernos el hará-kiri a hacérnoslo con una patata.

Me explico. De apenas entender la situación siento como que he perdido la razón. No la razón de lo racional, la otra. Esa que el hablar más alto que el resto y ser el último en callar te da. Es mejor para todos limitarnos a dar nuestra opinión y aceptar la que viene de la mesa de enfrente como orden de un superior. Pero demos la nuestra, compartamos nuestra opinión pese a saber que te tomarán por el pito de un sereno los que solo son capaces de repetir lo leído en una fotocopia. ¡¡Que más da! Mejor así, así no nos mataremos entre nosotros antes de que las hordas Hispanas lo hagan. Siempre quedará más bonito en los libros de historia el final de un párrafo en el que se cite un pueblo exterminado por sus vecinos.

Además ahora, con seis millones dos cientos mil parados que hay con DNI español, no te cuento más. Ya no entro en los seis millones, solo con que les den una placa a los doscientos mil últimos, que ya sabemos como suelen ser los últimos, fumando a escondidas del conductor como andan, ya podemos empezar a correr dirección Hendaia, no por la A-8 que es prohibido peatones, por la general, atentos con eso. Correr dirección Irun/Francia, donde vamos a parar.