Los firmantes del «Acuerdo de Gernika» manifestaron ayer que los gobiernos español y francés no van conseguir «truncar» las esperanzas de paz de la ciudadanía vasca. «Nosotros, los agentes políticos, sindicales y sociales no lo vamos permitir», destacaron Gorka Berasategi (LAB) e Itziar Arratibel (Esait).

En una rueda de prensa ofrecida ayer en Donostia, Berasategi y Arratibel, que comparecieron acompañados por Pernando Barrena (Sortu) y Nagore García (Herrira), entre otros representantes de los colectivos firmantes, criticaron la detención de Andoni Goikoetxea, Raúl Aduna, Kepa Arkauz, Ekhiñe Eizagirre, Julen Mendizabal e Igor Uriarte. Los seis fueron arrestados el martes por la Policía francesa en Bois, Montpellier y Brive-la-Gaillarde (Occitania),

A su parecer, con este tipo de actuaciones los ejecutivos de Madrid y París ignoran los acuerdos alcanzados por la sociedad vasca en favor de la resolución del conflicto. En este sentido, lamentaron que, en vez de caminar hacia la paz, los dos gobiernos han optado por «dar respuestas del pasado a la nueva situación política».

Recordaron que durante los últimos meses los gabinetes de Mariano Rajoy y François Hollande no han dado «ni un solo paso adelante» en el camino hacia la paz y la normalización. Para poder dar una giro de 180 grados a esta difícil situación, Berasategi y Arratibel exigieron a ambos dirigentes que «renuncien a actuaciones y actitudes que perjudican la construcción de un escenario de paz y democracia».

En cuanto a la postura de las agrupaciones presentes ayer en el Hotel Aranzazu de la capital guipuzcoana, los dos portavoces reiteraron el compromiso de los firmantes con la paz y reafirmaron su intención de seguir impulsando «un proceso de resolución integral del conflicto vasco para no dejar perder esta oportunidad histórica».

Paz para Euskal Herria

Para demostrar que los firmantes del «Acuerdo de Gernika» mantienen firme su compromiso con la paz, Berasategi y Arratibel avanzaron la celebración de concentraciones frente a todos los ayuntamientos vascos. Las movilizaciones, que llevarán por lema «Euskal Herria necesita la paz», tendrán lugar mañana al mediodía.

Ayer mismo tuvo lugar una concentración reivindicativa en la plaza de la Virgen Blanca de Gasteiz. La cita, convocada por LAB, STEE-EILAS, ESK, Herrira, Bilgune Feminista, Herrria 2000 Eliza, Ernai, Etxerat, Ikasle Abertzaleak, Sortu, Aralar, Eusko Alkartasuna y Alternatiba, fue secundada por un centenar de personas y estuvo presidida por el lema «Por la solución, no más detenciones. Stop a la represión».

En el transcurso de esta movilización, Arantxa Vázquez (LAB) y Celia Muñoz (Esk) leyeron un comunicado en euskara y castellano en el que denunciaron la «respuesta negativa de los gobiernos español y francés al nuevo ciclo político abierto en Euskal Herria. Un nuevo tiempo que comenzó el 20 de octubre de 2011, cuando ETA anunció, de manera unilateral, el cese definitivo de su actividad armada.

Al igual que hicieron los firmantes del Acuerdo de Gernika en Donostia, los agentes políticos, sindicales y sociales reunidos en la capital alavesa también subrayaron que, «hoy, cuando el escenario político abierto es totalmente diferente, a los gobiernos español y francés les ha llegado la hora de abordar las consecuencias del conflicto».

«Por desgracia, La Moncloa y el Eliseo están inmersos en una estrategia de inmovilismo, no han dado ni un solo paso, pero ese camino tiene cada vez menos apoyo», afirmaron antes de destacar que los colectivos convocantes «no daremos un paso atrás en los compromisos adquiridos con la paz definitiva, y trabajaremos conjuntamente con la sociedad de Euskal Herria en la pacificación y en la normalización política, por encima de coyunturas o de situaciones de represión».

Críticas a Lakua

Por su parte, ayer ELA consideró «inadecuada la actitud del actual Gobierno vasco, que ha decidido fiar la normalización política a una relación discreta con Rajoy, cuando este ha dado muestras suficientes e inequívocas de su negativa a dar cualquier paso en esa dirección».

El sindicato, que confirmó su presencia en las movilizaciones de mañana, recordó que «el PP rechaza pública y permanentemente cualquiera de las referencias resolutivas contenidas en la declaración de Aiete, que fue apoyada por una amplia mayoría política, sindical y social de nuestro país, incluidos el PNV y el PSOE».