Los búlgaros dan su voto a la derecha que les obligó a tomar las calles
El partido del ex primer ministro búlgaro Boiko Borisov, el GERB, se perfilaba ayer como vencedor de las elecciones legislativas anticipadas tras recibir el respaldo mayoritario de la ciudadanía, que en los últimos meses ha tomado las calles para denunciar la pobreza y la corrupción.
GARA | SOFÍA
La formación derechista Ciudadanos para el Desarrollo Europeo de Bulgaria (GERB), del primer ministro saliente, Boiko Borisov, que dimitió junto a todo su Gobierno en febrero por la presión de la protestas ciudadanas, habría ganado ayer en las urnas, aunque sin mayoría, lo que podría podría volver a sumergir en la crisis al país, el más pobre de la Unión Europea.
De acuerdo con los sondeos a pie de urna, el partido de Borisov habría logrado entre el 30,4% y el 34% de los votos en las elecciones legislativas anticipadas, por delante de su principal rival, el Partido Socialista de Bulgaria (PSB), que habría obtenido entre el 25,3% y el 27,1%.
De confirmarse el resultado, sería la primera vez que un partido es reelegido desde la caída del bloque soviético hace 23 años.
Según la proyección realizada por el instituto demoscópico Alpha Research en base a esos datos, la derecha lograría unos 97 diputados, frente a los 85 de los socialistas. El partido de la minoría turca DPS, con en torno a un 10% de los votos, tendría 34 representantes, y el ultranacionalista Ataka, con entre el 7% y el 8% de los sufragios, se haría con 24 asientos.
Está previsto que los primeros resultados parciales se den a conocer durante la mañana de hoy.
En cualquier caso, no parece que el GERB vaya a lograr una mayoría parlamentaria por lo que se augura una complicada negociación para la formación de un Gobierno de coalición dadas las diferencias entre todas las formaciones con representación parlamentaria.
Borisov se vio obligado a dimitir en febrero por la ira popular, cuyo detonante fueron los altos precios de la electricidad y el gas en pleno invierno pero ni las criticadas políticas de austeridad ni los varios escándalos que le han salpicado en los últimos meses han impedido la victoria de este antiguo guardaespaldas y karateca apodado «Batman» que, no obstante, ha conseguido nueve puntos menos que en los comicios de 2009.
Nada más conocerse estas proyecciones, centenares de ciudadanos se concentraron en el centro de Sofía para protestar contra la victoria de la derecha, que consideran fraudulenta, según informaron medios locales.
La apatía de los votantes y su desilusión con la clase política ha marcado una campaña que también se ha visto ensombrecida por un escándalo de escuchas ilegales, que ha salpicado al ministro de Interior, y las acusaciones de compra de votos y de fraude electoral. Por eso, se esperaba que la participación no llegara al 50%.
Un ciudadano búlgaro fue condenado a cinco meses de cárcel y una multa de 5.000 euros por tratar de comprar votos para las elecciones parlamentarias, informó ayer la Fiscalía búlgara.