Muchas personas arroparon y se solidarizaron ayer con Tasio Erkizia ante su paso por el juzgado de Bilbo imputado por el escrache en la junta general de BBK hace un mes. Arantza Urkaregi, en nombre de EH Bildu, explicó que «seguiremos movilizándonos por nuestros derechos» y advirtió que «la imputación contra Tasio Erkizia no va a paralizar la necesaria movilización social».

La defensa de Tasio Erkizia solicitará el archivo de la causa que se instruye en el Juzgado número 3, una vez de que a mediodía de ayer Erkizia prestó declaración ante una funcionaria en ausencia de la juez instructora. EH Bildu aseguró ayer que «tanto el atestado de la Ertzaintza, como los ertzainas que han declarado esta semana por este asunto, atribuirían un presunto delito de atentado en relación a la citada concentración a una persona que no es Erkizia, pese a lo cual, la jueza le ha imputado. La defensa considera que es un asunto sin base jurídica».

Arantza Urkaregi denunció a las puertas del juzgado que «la derecha quiere que seamos los trabajadores quienes soportemos las consecuencias de la crisis que padecemos y continúa para ello con su ofensiva brutal; desde la desaparición de los convenios por efecto de una política fiscal injusta, hasta el desmantelamiento de las cajas de ahorros mediante una ley hipotecaria al servicio de la banca. Estamos ante una verdadera ofensiva que busca acabar con los derechos de los trabajadores amparándose en el impacto de la crisis», concluyó.

Avaricia de los banqueros

Tasio Erkizia, como en sus mejores tiempos, aseguró que «esta citación es la demostración más clara de que los responsables políticos y económicos de este país saben que hay indignación y rabia contenida por el paro que estamos sufriendo y la miseria a la que nos llevan». Dijo que «hay responsables de la crisis, el contexto no es el mercado como algo etéreo, es una crisis provocada por la avaricia de grandes banqueros y las multinacionales. Los políticos, en lugar de pararles los pies, nos quitan lo poco que tenemos los trabajadores y el pueblo sencillo». Expresó que «además de apaleados nos quieren sumisos y calladitos, pero no lo van a conseguir. En este pueblo la dignidad de los trabajadores y la lucha de quienes nos han precedido nos exige mantenernos en pie y seguir luchando».

Culpó a PNV y PP de «expoliar la riqueza popular de las cajas, que son fruto del pueblo».