Si hay una película que es imposible doblar, esa es «The Trip», que solo puede ser vista en su versión original. De otra forma el extraordinario trabajo actoral de Steve Coogan y Rob Brydon correría peligro. La mayor parte de sus diálogos están sacados de películas anglosajonas, con frases conocidas o representativas de actores famosos de los que hacen divertidas imitaciones.

La interminable lista incluye a Sean Connery, Richard Burton, Michael Caine, Michael Sheen, Ian McKellen, Hugh Grant, Richard Burton, Anthony Hopkins, Al Pacino, Robert De Niro, Liam Neeson y Bob Balaban, entre muchos otros. Las imitaciones son tan precisas, que en el caso de Michael Caine, por ejemplo, distinguen entre su voz de joven y la actual, ya de viejo.

La excusa para el duelo actoral entre Coogan y Brydon es una gira gastronómica que comparten por el norte de Inglaterra. La invitación era en principio para Steve Coogan, actor más famoso que Rob Brydon, y su pareja, pero ésta le abandona. Llama antes a otros colegas de profesión, pero no están libres, por lo que recurre finalmente al cómico e imitador.

La ruta gastronómica está pagada por el diario «The Observer», con dietas, alojamiento y comidas incluidas. En cuanto al sueldo que perciben, Coogan se queda con el 60 por ciento y deja a Brydon el 40 por ciento, estableciendo ya de entrada una jerarquía profesional que intentará mantener durante todo el viaje, y de ahí los duelos de imitaciones que mantienen entre plato y plato.

La gran cuestión es que ninguno de los dos presentadores es gastrónomo, ni tampoco especialmente sibarita, por lo que aprovechan las comidas para hablar de su trabajo y de sus cosas. No solo acuden a restaurantes y hoteles, también hacen visitas culturales de paso, como cuando se acercan a la casa-museo del poeta Coleridge, lo que les permite hablar sobre el romanticismo y pensar en su vida sentimental.

Comen en restaurantes de todas las categorías, hasta en un típico pub sentados en taburetes delante de la barra. Pero el más famoso es L'Enclume, en Cartmel. Tiene dos estrellas Michelin y su cocinero es Simon Rogan, uno de los principales impulsores de la reciente revolución en la otrora pobre cocina inglesa, junto a Heston Blumenthal, cuyo Fat Duck se puede ver perjudicado después del caso de intoxicación en el que se ha visto envuelto su local.

La parte dedicada a L'Enclume es la única en la que la cámara de Winterbottom presta verdadera atención a la sofisticación de los elaborados platos, en la medida en que dejan bastante impresionados a sus dos comensales, quienes parece que nunca antes habían probado nada parecido.

Por lo demás, las únicas estrellas de la función son ellos, permitiéndose improvisar a partir de un guión que les sirve de guía, a partir de la serie televisiva que ya protagonizaron.