EH Bildu pregunta a Lakua por su intromisión en el arresto de Alkorta
El parlamentario de EH Bildu Julen Arzuaga registró ayer en el Parlamento una pregunta a la consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, sobre si es cierto que la Audiencia Nacional encomendó la detención de Urtza Alkorta a la Policía española y la Guardia Civil y la Ertzaintza se ofreció luego a proceder al arresto en Ondarroa. GARA publicó ayer que la documentación en su poder sustenta esta versión.
Iñaki IRIONDO |
La información publicada ayer por este diario, en función de la documentación que obra en su poder, recoge que la Audiencia Nacional ordenó a la Policía Española y a la Guardia Civil la detención de Urtza Alkorta para cumplir la mitad de la condena que tenía pendiente. Sin embargo, la Ertzaintza llamó al tribunal de excepción español para anunciar que Alkorta aparecería en público en Ondarroa el día 10 de mayo y anunciar que procedería a su detención si antes no se personaba voluntariamente en comisaría.
Cabe recordar que uno de los argumentos del Gobierno de Lakua para defender la intervención de la Ertzaintza fue que una «policía integral» no se puede sustraer a las órdenes del poder judicial. La documentación en poder de GARA hace dudar de que, efectivamente, existiera una orden judicial directa a la Ertzaintza.
Con esa misma documentación en la mano, el parlamentario de EH Bildu Julen Arzuaga anunció ayer la presentación de una serie de preguntas a la consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia. La primera de ellas es si el relato anteriormente planteado es cierto, es decir, si el juez ordenó la detención a las FSE y la Ertzaintza se ofreció para hacer el arresto. Y pide, además, la fecha y el modo en el que la Policía autonómica realizó esa oferta a la Audiencia Nacional. La tercera pregunta es «por qué y con qué criterios político-policiales decidió la Ertzaintza ofrecerse para cumplir esa misión».
«Afán de realizar la detención»
En una comparecencia pública, Julen Arzuaga señaló que la documentación muestra «un afán y empeño» de la Ertzaintza en efectuar esta detención, y se pregunta por qué. Sostuvo que la consejera «mintió» en sus explicaciones» y que nunca tuvo, pese a lo dicho, una orden directa que cumplir o incumplir.
El parlamentario de EH Bildu denunció que mientras la mayoría social vasca lo que está demandando es la vuelta de los presos uno a uno a Euskal Herria, lo que el PNV está haciendo es enviarlos uno a uno hacia las cárceles españolas.
El 6 de mayo la Audiencia Nacional «decreta la busca, detención e ingreso en prisión de Urtza Alkorta para el cumplimiento de la pena de prisión impuesta en sentencia firme, a cuyo efecto oficiese a la Dirección General de la Policía y Guardia Civil para que se dé cumplimiento a tal orden», añade.
El 10 de mayo se recibe en la AN una llamada de la Ertzaintza comunicando que Urtza Alkorta tiene previsto aparecer en público y que «salvo presentación voluntaria de la misma en la comisaría para su detención se procederá a llevarla a cabo».
El Plan de Paz y Convivencia presentado recientemente por el Gobierno de Lakua recoge como una de sus iniciativas elaborar un «Compromiso social de la Ertzaintza para la convivencia y los derechos humanos». Según se señala, uno de su objetivos es «renovar y reforzar el compromiso de la Ertzaintza con los principios, valores, libertades y derechos democráticos», y otro, «contribuir en este nuevo contexto sociopolítico a consolidar una cultura de paz, convivencia y respeto a los derechos humanos».
UPyD y PP llevaron ayer esta cuestión al pleno de control del Gobierno del Parlamento, sosteniendo que el punto supone un menosprecio a la Ertzaintza. Gorka Maneiro basó su afirmación en declaraciones realizadas por sindicatos policiales como ErNE, CCOO y ESAN. Arantza Quiroga defendió el papel de la Policía autonómica en la lucha contra ETA y pidió que no se utilicen este tipo de programas, que «han sentado mal» en el cuerpo, para «complacer a Batasuna».
Frente a ello, el lehendakari, Iñigo Urkullu, pidió que no se le den lecciones en la defensa de la Ertzaintza, cuando «hemos defendido siempre y a veces en solitario» su compromiso. Pero sostuvo que como institución pública que es la Ertzaintza tiene también que adecuarse «en positivo» a «un nuevo tiempo sin el condicionante del terrorismo».
Ambas partes pugnaron por ver quién reconocía más y agradecía mejor la labor que ha realizado la Ertzaintza, en los últimos años, «con gran eficacia y compromiso en momentos de terrorismo», contribuyendo «a la paz y los derechos humanos». I.I.
