eh jaietan
El barrio de Donibane inicia unas fiestas con más respaldo vecinal que nunca
El barrio iruindarra de Donibane dio comienzo ayer a sus fiestas tras calentar motores con una semana cultural y el Gazte Eguna. Las celebraciones se alargarán hasta el domingo y la comisión destaca la cantidad y variedad de las actuaciones musicales.
GARA |
El cohete que da arranque a las fiestas del barrio iruindarra de Donibane voló ayer desde el recinto festivo de la Vaguada. El encendido de la mecha fue un honor compartido entre el proyecto vecinal San Juan Xar y los comerciantes de la Plaza de Azuelo por su implicación con el barrio y por volcarse con los festejos que se alargarán hasta mañana domingo. Al cohete siguió el tradicional baile de los mayordomos con música de la fanfarre.
El barrio había calentado motores a lo largo de los últimos días, en los que se ha celebrado una semana cultural y, en particular, este jueves en que tuvo lugar el Gazte Eguna. Los promotores están muy satisfechos de la implicación de los vecinos, asociaciones y comercios «que ha sido más numerosa que nunca».
La organización destaca de este año la calidad y variedad de las actuaciones musicales. En total, desfilarán once grupos que abarcan desde el rock y el hip-hop a la percusión africana (hoy, a las 21.00 horas) y los sones cubanos. Uno de los más esperados, el de Motxila 21, un grupo compuesto por jóvenes con síndrome de Down con apoyo de músicos de la talla de El Drogas, será esta tarde a las 19:00 horas. La comisión confía esta noche a Trikidantz.
El domingo se celebrará el ya veterano concurso de calderetes (van por la decimoctava edición), que empalmará con las olimpiadas populares y -para los que ya no se mueven tanto- también con el campeonato de mus.
En total, son más de 50 las actuaciones las que los vecinos han logrado incluir en el programa, además de otra decena en la semana cultural y el Gazte Eguna. Y todo ello, además, sin que el Ayuntamiento se implique ni ponga facilidades para sacarlo adelante.
Los organizadores critican que, otra vez más, los permisos no han llegado hasta dos días antes de que lanzaran el chupinazo y denuncian que «de un año para otro nos prohiben o cambian de ubicación actos que llevan celebrándose más de 30 años en el mismo lugar». Además, también cuestionan el aumento de las tasas, de las coberturas de seguros y de los papeleos que se les exigen. De todos modos, la comisión de fiestas reitera que está dispuesta a hablar.
El proyecto vecinal San Juan Xar tiró el cohete de la mano de los comerciantes de la zona de la Plaza de Azuelo. La comisión agradeció así la labor de San Juan Xar en sus tres años de trabajo así como el compromiso del pequeño comercio.