el punt avui+ | Editorial 2013/6/20 (Traducción: GARA)
El FMI da una receta fracasada
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha determinado que la tasa de paro de España, como la de Cataluña, es "inaceptablemente" elevada, una apreciación que tampoco era necesario que este organismo multilateral certificara. La vigorosa tasa de desempleo es el resultado de dos factores. En primer lugar, que el crecimiento anterior a la crisis tenía un gran componente especulativo y que una buena parte de los recursos, y la deuda contraída, se dedicaban a la construcción. En segundo lugar, que la soberanía económica del gobierno español es nula. En otras circunstancias se habría podido hacer una política anticíclica, es decir, sustituir la demanda privada para activar la economía. Pero ahora se ha impuesto una política de austeridad.
La solución que da el FMI para reducir la tasa de paro es muy simple: abaratar el despido y bajar los salarios. Pero el FMI debería considerar que la reforma laboral aprobada hace unos meses, que ya recoge este espíritu, no ha servido para reducir el paro, sino todo lo contrario. El FMI también debería considerar que los salarios son una parte importante, pero no sustancial, de la competitividad laboral. Y que salarios más bajos significa también menos consumo, lo que llevaría al cierre de empresas ya más desempleo. (...)ra no es militar sino financiero.