Los rebeldes armados sirios recibirán de sus aliados todo el material «necesario»
Los aliados de los rebeldes armados sirios acordaron oficialmente ayer proporcionarles «urgentemente» el material y equipamiento «necesario» para cambiar el equilibrio de fuerzas sobre el terreno, es decir, ayuda militar, para que la oposición pueda negociar en situación más ventajosa.
GARA |
El grupo denominado Amigos de Siria acordó ayer en Doha proporcionar «urgentemente» todo el material y el equipamiento necesario a la oposición al régimen del presidente sirio, Bashar al-Assad, según indicó en un comunicado conjunto que elude hablar de «armar» a los rebeldes. Sin embargo, el ministro qatarí de Exteriores, jeque Hamad bin Yasem bin Yaber al-Thani, señaló que se habían adoptado «decisiones secretas» relacionados con movimientos prácticos sobre el terreno para ayudar a los rebeldes frente al Ejército regular.
El documento oficial compromete a los firmantes a «proporcionar urgentemente sobre el terreno todo el material y el equipo necesario para la oposición, cada país según sus propios criterios, con el fin de habilitarles para contrarrestar los brutales ataques del régimen y sus aliados». En la reunión de Doha, los Amigos de Siria -EEUU, Estado francés, Alemania, Egipto, Italia, Jordania, Qatar, Arabia Saudí, Turquía, Emiratos Arabes Unidos y Gran Bretaña-, acordaron canalizar todo el apoyo militar a través del rebelde Consejo Supremo Militar.
Pasando por alto su intervención más o menos directa en el conflicto, condenaron la intervención de combatientes de Hizbulah, de Irán y de Irak y les exhortaron a «abandonar Siria de forma inmediata».
El apoyo de Hizbulah ayudó a las tropas leales a Al-Assad a recuperar el control de Qusseir y al parecer combatientes chiíes libaneses e iraquíes han sido vistos también en torno al santuario chií de Sayyid Zainab, al sur de Damasco, mientras que se cree que hay comandantes iraníes asesorando a los oficiales del Ejército sirio en la contraofensiva.
El texto de los Amigos de Siria señala que estas intervenciones extranjeras «amenazan la unidad de Siria (y) agravan el conflicto» en la región. También expresa su preocupación por la presencia cada vez mayor de «elementos terroristas», sin situarlos en las filas de la rebelión armada, y de la creciente radicalización en el país.
Durante la reunión, Al-Thani instó a sus aliados a proporcionar ayuda militar a la rebelión armada al señalar que «la fuerza es necesaria para lograr la justicia y la entrega de armas es el único camino para la paz en Siria».
«Decisiones secretas»
Al término de la cita, Al-Thani habló de «decisiones secretas» adoptadas por todos los países, a excepción de dos, sobre la forma de proporcionar «ayuda práctica al Consejo Militar» y agregó que «todo el mundo está convencido de la necesidad de una intervención temprana para ayudar a la rebelión» tras la intervención de Irán y Hizbulah. Destacó que el equilibrio sobre el terreno y así como la ayuda militar a la oposición son importantes para que mejore su situación.
Por ello, insistió, «pedimos a nuestros amigos que intervengan de forma rápida». Subrayó que los Amigos de Siria están de acuerdo en la necesidad de una intervención rápida, pero aclaró que no se trataría de una al estilo clásico, sin dar más detalles.
Sin embargo, antes de comenzar el encuentro, su homólogo británico, William Hague, afirmó que la postura de su país no ha cambiado y que todavía no ha adoptado una decisión para armar a los rebeldes. «No hay ningún cambio en la política del Reino Unido hacia Siria, ni sobre la cuestión tan debatida de suministrar ayuda letal de cualquier tipo a la oposición. Aún no hemos tomado la decisión de hacerlo», dijo Hague. Añadió que es una decisión que debe tomar el Parlamento de su país, y señaló que Gran Bretaña centra sus esfuerzos en proporcionar ayuda humanitaria a los sirios y en promover una solución política.
Pese a respaldar el suministro de armas a la rebelión, el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, también defendió una salida pacífica al conflicto, y acusó a Damasco de entorpecerla.
La reunión tuvo lugar después de que el jefe del Consejo Militar Supremo del ELS, general Salim Idris, afirmara que los rebeldes han conseguido ya armas sofisticadas que cambiarán la situación.