EH Bildu pide la dimisión de los cargos del PNV implicados en el fraude de Zizurkil
GARA | DONOSTIA
EH Bildu ha pedido la dimisión de los cargos del PNV implicados en los fraudes registrados en la consulta popular en torno al puerta a puerta celebrada en Zizurkil este fin de semana. Entre otras cosas, un vídeo difundido en Naiz mostraba el momento en el que una vecina de la localidad depositaba primero su propio voto y después el de su esposo, alegando que este se lo había delegado. No obstante, para ello, el titular del voto debe firmar la papeleta, condición que la mujer llevaba sin cumplimentar, como queda en evidencia en las imágenes. Es en ese momento cuando Marian Lazkano, exalcaldesa por el PNV, y una de las personas sentadas en la mesa, le sugiere que vaya a la cabina, al ser consciente de que una cámara está filmando.
La vecina se ausenta tras la cortina azul de la cabina, volviendo poco después a la mesa con la papeleta firmada. Así, se le autoriza introducir el voto en la urna. Junto a Lazkano estaba sentada, entre otras personas, la juntera jeltzale Zorione Etxezarraga.
No fue el único fraude que recogieron las cámaras. Un segundo vídeo que circuló por la red demostró cómo una persona sin estar empadronada en Zizurkil –única condición para poder participar en la consulta– pudo votar empleando la identidad de una persona que sí está empadronada.
Ante la evidencia de los hechos, EH Bildu ha responsabilizado a Lazkano, Etxezarraga y al concejal del PNV Egoitz Sorozabal, solicitando su dimisión. Para la coalición, lo ocurrido en esta votación, organizada por la plataforma Tolosaldea Txukun, es «un fraude político de primera magnitud» y tergiversa el principio democrático básico de una persona, un voto.
Voto delegado, talón de Aquiles
EH Bildu apunta que alrededor de 750 vecinos de Zizurkil respondieron a la convocatoria, lo cual representa al 34% de las personas censadas en la localidad. Según los organizadores, se contabilizaron 1.004 votos, de los cuales 990 fueron en contra del puerta a puerta.
Por lo tanto, según la coalición, «dos de cada tres vecinos con derecho a voto hicieron oídos sordos» al llamamiento, y «pese a los intentos por engordar las cifras a toda costa, Tolosaldea Txukun, esgrimiendo la existencia de alrededor de 300 votos delegados, tan solo ha sido capaz de contabilizar un 45% de participación virtual».
«Es decir –agregaron–, utilizando cualquiera de las fórmulas de contabilidad imaginables, esta consulta popular solo ha agrupado a quienes en las últimas elecciones votaron con una papeleta diferente a la de EH Bildu». Censuraron «la artimaña del voto delegado», «talón de Aquiles de esta escenificación».
EH Bildu defiende por último el valor de las consultas populares, lamentando que «al PNV la voluntad popular le importe bien poco» y «se sirve de este tipo de consultas de encargo». Reivindica que estas «merecen un mínimo de respeto».