Con la base de unas excelentes producciones, el trío de Irun formado por Stepi, Masta y Moro podría ser (quizá deberían ser) una de las bandas más solicitadas de este verano, en especial si se valora el poder rítmico y comunicativo de «Aldaketa», su segundo disco.

BSS lleva diez años entrelazando el hip hop y el reggae; según la época, con mayor peso de un lado o del otro. Han conocido tiempos más corales en sus inicios, hasta llegar a la síntesis actual: sus tres componentes.

Stepi se siente desde joven atraído por el reggae, el ska, el dance hall... Lo primero fue situarse detrás de los platos, para profundizar después con Bad Sound System. Tras conocer a Masta surge una banda de hip hop, Imperio Sabio, donde perdura varios años hasta decidir dedicarse al sound system. Finalmente, retoma el primer proyecto, BSS.

Masta sigue con Imperio sabio (uno de los primeros grupos de hip hop) unos años más tarde se une al proyecto Bad Sound System de Stepi con otros mc (master of ceremony)

Por otra parte, Moro pertenece a HR grupo de hip hop con un concepto muy fresco para el momento (pioneros en EH). Está influido por gente como Suian Supa Crew. Tras varios años de historia HR, termina en BSS, que llega a tener hasta ocho miembros: Masta, Moro y Brujo de HR, Seo de La Secta, dj Sucio a los platos y selecta Stepi. Todos apiñados en un pequeño local de Mosku (Irun). «No había ningún plan con Bad Sound System, era como nuestro patio de recreo donde poder jugar, pero con el tiempo algunos de nosotros nos dimos cuenta que teníamos un feeling especial con el proyecto de Stepi así que seguimos. Desaparecieron los otros proyectos y los mcs, tal y como si de la selección natural de Darwin se tratase».

El internacional «Aldaketa» cuenta con grandes riddim (producciones especiales para ellos) que BSS enriquecen con sus aportaciones, estilo vocal, sentido rítmico y unos textos donde los políticos, los banqueros, el capitalismo... es motivo de observación. Resume asimismo el derecho a subrogarse cierto honor como pioneros del género.

«Kapitalismo», «Beti berdin», «Babylon no va a parar», «Caminando», «Rsistentzia», «Reggae Irun», «Herri denak aske», «Policías»... son canciones de golpe directo, afortunadas en prestaciones, sugerentes para el directo y siempre con la visión crítica hacia un mundo a la deriva.

Son un trío, pero con buen sustento externo.

Es cierto, tenemos la suerte de tener un montón de amigos que colaboran con nosotros en este disc. Algunos nos producen como Bahatawi (Hondarribia), Fogata Sound (París), Jahtari (UK), Ill Billy Hi Tech (Alemania), Rude (Alemania-Italia), Weedy G, Jam2, Rootdown Records y Mau. Además de darle más chicha a las producciones de Stepi con Jon (trombón de Esne Beltza), Kortxo y Mikel. Otros nos ayudan con los coros como Sorkun y Seo. Y otros colaboran con sus letras y voces como Rude HIFI (Italia-Alemania), Lengualerta (DF México) y ASK( Irun).

¿Y quiénes les han dejado huella para llegar hasta «Aldaketa»?

Nuestras influencias son muy variadas, como cabe imaginar: Peter Tosh, Public Enemy, Bob Marley, Capleton, Alborosie, Sizzla, Luciano, etc. La lista no tiene fin. Con ellos también aprendimos a ser revindicativos y a pelearnos en la calle con unos bafles y un generador. Pero si hemos tenido un referente en cuanto a la actitud, ese es Fermin Muguruza. Ya ves, el ejemplo lo teníamos en el mismo barrio. Siempre fiel a lo que crees y luchando por ello, además de su música.

Y todo desde la casta del barrio de Mosku.

Sí, ahí pasamos buena parte de nuestro tiempo libre y ahí tenemos nuestro local de ensayo desde hace ya mas de diez años. Componemos, grabamos, ensayamos, hablamos, descansamos... Somos muy de barrio, sí. Jajaja. De ahí el tema de «Rsistentzia», un humilde apoyo al barrio de todos y todas los que lo quieren.

Algunas bases son de Stepi, pero cuentan con un buen número de contactos externos.

Así es, algunas las ha compuesto Stepi y otras nos las envían en plan: «¡Eh! hermanos he hecho este hit y he pensado en vosotros! Otras las pedimos porque las hemos escuchado y nos flipan». Un poco de todo.

«Camina el reggae vasco...». ¿Se viven buenos momentos en Euskal Herria para el reggae?

Creemos que sí. Cuando comenzamos en esto había que lidiar con mucha gente, porque pensaban que esto era una americanada o que no tenía que ver con la música contestataria, pero ahora hay muy buenos y serios grupos de esta música en Euskal Herria. Las nuevas generaciones conocen la cultura y siguen las sesiones con mucho conocimiento. Aun así, hay que seguir trabajando duro y expandirlo más, que llegue a todos los rincones de nuestra tierra.

Y hablando de movimiento, en el tema «Caminando» se menciona a un buen número de gente, entre ellos a Fermin y Sorkun.

En ese tema hablamos justamente de toda la gente que durante estos años nos ha apoyado, ayudado, compartido su música y experiencias con nosotros, por lo que obviamente hacemos referencia a Muguruza, que ha sido de los primeros que ha creído en nosotros y apoyado, y a Sorkun por lo mismo. Pero hay mucha más gente en el tema como todos los que han participado en nuestros discos, gente con la que estuvimos en nuestra gira en México, en Japón, y, sobre todo, la gente que viene a vernos a los directos, escucha nuestra música... Todos y todas son muy importantes para nosotros porque nos dan la fuerza para seguir y nos mantienen donde estamos.

Han integrado la txalaparta en «Herri denak aske» con una excelente fusión. ¿Es una muestra musical identitaria?

La tocan dos grandes músicos de Zestoa: Kortxo y Mikel, muy buenos txalapartaris. ¿Muestra musical identitaria? Para nosotros es importante mantener nuestra historia cultural y la mejor manera es utilizarla y que siga viviendo, metamorfoseándose. Nos gusta mezclar, pero no es algo que hayamos inventado nosotros. La txalaparta es un instrumento muy agradecido para mezclarlo con otros estilos musicales.

¿Los juegos vocales les obligan a trabajar por capas, todos al unísono...?

Solemos crear una línea vocal principal y luego acompañamientos para darle más fuerza a lo que queremos resaltar o remarcar, pero cada canción es diferente y la tratamos de manera individual según lo que creemos que necesita.

Sus letras son político/sociales. ¿El poder corrompe?

Creemos que el sistema existente ya se ocupa de que la gente que llegue al poder sea la más potencialmente influenciable por la corrupción. Si es alguien de principios inamovibles seguro que el sistema le echa de la maquinaria antes de que llegue a una línea de poder. Aún así, se necesita gente muy preparada mentalmente y dedicada. No vale cualquiera, algo así como la dialéctica de Platón.

Y tal y como se comprueba por la historia y por los numerosos casos de corrupción, ¿quién vigila a los vigilantes?

Creemos que debe ser el pueblo. Todos tenemos responsabilidad, en este asunto no vale solo quejarte, hay que comprometerse.

«Capitalismo, ha llegado vuestro final», cantan. ¿No piensan que tiene demasiadas vidas y que es capaz de asimilar y mutar hasta el infinito?

El problema no reside en el capitalismo en sí, sino en la evolución del ser humano. El capitalismo es parte de la historia de la evolución del humano, lo queramos o no. Está en nuestra historia y, para bien o para mal nos lleva al punto donde nos encontramos. Lo importante es qué vamos a hacer ahora. El capitalismo ha llegado a su final, como llegó la monarquía. La humanidad tiene que seguir su camino y evolucionar. No hay un final ni una sociedad perfecta. Solo la intención y el esfuerzo diario de una sociedad por ser perfecta, aun sabiendo que nunca lo conseguirá, es lo que la hará mejor y más evolucionada. Con todo, no somos sabios ni filósofos, solo gente normal.