LAB exige explicaciones sobre los incentivos a directivos de Osakidetza
Los incentivos que los directivos de Osakidetza recibían en sus nóminas por iniciativa del anterior Gobierno del PSE han supuesto, según LAB, más de 900.000 euros anuales. La central denuncia estas primas y pide explicaciones sobre el nuevo sistema que plantea el PNV.
GARA | DONOSTIA
El sindicato LAB exige, a través de un comunicado, la comparecencia del consejero vasco de Salud, Jon Darpón, para que explique públicamente la situación en torno a los incentivos que hasta ahora venían cobrando los cargos directivos de Osakidetza y que suponían que más de 150 cargos cobraran, además del sueldo, unos incentivos anuales superiores a los 900.00 euros.
Según explica la central, la semana pasada el Consejo de Administración de Osakidetza decidió dejar de abonar los incentivos que cobraban los directivos de Osakidetza y poner en marcha un nuevo sistema de retribuciones para estos cargos. Al respecto, recuerda que dichas primas se pusieron en marcha con el anterior Ejecutivo del PSE y supusieron que más de 150 directivos cobrasen unos incentivos anuales por valor de más de 900.000 euros, que habría que añadir a su sueldo.
Ante este hecho, LAB denuncia que, «mientras a los trabajadores se nos recortan salarios y derechos y se recorta la sanidad pública vasca, parece sí haber dinero para el pago de `incentivos'». Tras tener constancia de que el Gobierno del PNV seguía pagando dichas primas, la central exigió información aunque, según apunta, no ha obtenido datos suficientes. Por ello lanza a Darpón dos preguntas concretas: cuánto dinero se ha pagado por estos conceptos durante el mandato de Iñigo Urkullu y cuánto pasarán a cobrar con el nuevo sistema.
Por tanto, exige al consejero que dé explicaciones públicas en el Parlamento, al tiempo que pide que se ponga fin al pago de incentivos a directivos y se eliminen todos los cargos de libre elección que no son más que una «puerta» al «enchufismo».
LAB reivindica que no se paguen incentivos a directivos y que se eliminen todos los cargos de libre elección por considerar que son una «puerta en la administración pública vasca al enchufismo y al partidismo».