Los forenses recomiendan que Josu Uribetxeberria no vuelva a prisión
GARA | MADRID
Los forenses de la Audiencia Nacional española que han examinado la situación de Josu Uribetxeberria han detectado «un empeoramiento del proceso oncológico tras una fase de estancamiento» y descartan que la cárcel sea «el lugar más conveniente para seguir el tratamiento que el paciente requiere». La Fiscalía ha anunciado, según informó la agencia Europa Press, que presentará alegaciones a este informe.
El informe ha sido elaborado por forenses del Instituto de Medicina Legal de la Audiencia Nacional tras examinar su historial clínico en el Hospital Donostia en el que está siendo tratado, y visitar la cárcel de Zaballa por si pudiera seguir allí su tratamiento.
Para ello, los forenses, previo consentimiento verbal, acudieron al hospital el mismo día en que Uribetxeberria pasaba una consulta en setiembre.
Según la información que les facilitó el equipo médico responsable, la evolución clínica de Uribetxeberria «ha sido objetivamente desfavorable, tanto desde el punto de vista radiológico como analítico».
El equipo médico oncológico informó además a los forenses acerca de la falta de eficacia del tratamiento que estaba siguiendo el vecino de Arrasate, al que han aconsejado que sea tratado con otro fármaco que se ingiere por vía oral y que causa numerosos e importantes efectos secundarios.
Evolución negativa
Ante estos datos, los forenses concluyen en su informe, fechado el 15 de octubre, que la enfermedad, «a pesar del tratamiento recibido, sigue su evolución natural» y si bien en un informe anterior se hablaba de «un estancamiento del cuadro clínico, a la vista de los últimos resultados, esta situación se ha roto y ya no parece resultar efectivo el tratamiento seguido».
«Por todo ello, se mantiene la situación de enfermedad grave e incurable», no siendo «previsible el óbito» en los próximos tres o cuatro meses «salvo complicaciones».
En cuanto a un posible tratamiento en prisión, los forenses indican que si bien la de Zaballa «reúne todas las condiciones personales y materiales necesarias» para atenderle, la situación actual del paciente, el novedoso tratamiento que le ha sido prescrito por los médicos «y las posibles complicaciones, algunas de ellas graves, hacen que el centro penitenciario no sea el lugar más conveniente para seguir el tratamiento que el paciente requiere».
Además, el informe de los forenses destaca que «desde un punto de vista `exclusivamente médico' y valorando los aspectos psicológicos de un paciente oncológico que presenta una enfermedad grave e incurable, el tratamiento debería realizarse en el entorno más favorable tanto desde el punto de vista físico como psíquico».
El informe ha sido emitido a petición del juez de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional, José Luis Castro, que el pasado julio encargó a estos forenses «un informe detallado» sobre Uribetxeberria, atendiendo a la petición de la Fiscalía del tribunal especial de que se hiciera «una nueva evaluación de las circunstancias que concurren en el enfermo, pues ya ha sido objeto de tratamiento» durante los once meses que llevaba entonces de libertad condicional.
En un principio, la defensa de Uribetxeberria se negó a que fuera reconocido, por lo que Castro emitió un auto en el que reiteraba que el vecino de Arrasate debía ser examinado porque a ello le obliga su situación de libertad condicional.
La ciudadanía vasca sigue reclamando la vuelta a Euskal Herria de los presos y presas. Ayer se repitieron las concentraciones solidarias en Santurtzi, donde se reunieron 65 personas, y en la Arrotxapea, donde se dieron cita 51 vecinos.
Unas 150 personas se concentraron ayer en Gernika en solidaridad con Jone Amezaga, que hoy hará frente a «un juicio político» en la AN, y con los procesados de los sumarios 35/02 y 26/11. Mañana se repetirá el acto en Merkurio a las 19.30.