La diputada de Hacienda de Gipuzkoa, Helena Franco, reprochó ayer al PSE haber «bloqueado» la aprobación mediante lectura única de las inversiones a las que se destinarán los 18 millones de euros del reparto del aumento del déficit al 1,2% del PIB, un procedimiento «que sí ha aceptado en Araba».

Franco compareció en la Comisión de Hacienda de Juntas Generales donde explicó que su propuesta destina 6 millones de euros para pequeñas inversiones de los ayuntamientos, «primando los de menos población», 3,1 millones a la creación de empleo y el resto a diferentes destinos entre los que figuran infraestructuras dañadas por las inundaciones.

La partida de 6 millones a los consistorios es la que ha suscitado críticas por parte de PSE, que presentará una propuesta alternativa. Helena Franco afirmó que la discriminación positiva hacia los ayuntamientos más pequeños está justificada porque son los que tienen una mayor carencia de recursos.

Añadió que la propuesta foral es «para el consenso» y «garantiza el equilibrio territorial y sectorial» al tiempo que recordó que, dados los plazos de tiempo -las partidas deben estar aprobadas antes de final de año- el debate «no puede alargarse».

Insistió en que esta suma no es «una subvención sin retorno» sino un endeudamiento adicional, por lo cual debe contar con el visto bueno de las Juntas Generales mediante una norma foral.

El portavoz del PNV, Markel Olano, defendió que los ayuntamientos pequeños hacen un «esfuerzo titánico» para hacer frente a sus gastos por lo que su grupo acepta el planteamiento de aprobarlos ya que esto «favorece la cohesión territorial».

Petición en Bizkaia

En Bizkaia, EH Bildu ha solicitado que la ampliación del límite de déficit y los 27 millones adicionales de los que va a disponer la Diputación deben repercutir también en Acción Social e inversiones municipales.

La coalición soberanista estima que la propuesta de distribución hecha por la Diputación «no plantea ninguna inversión en Acción Social, no toma en cuenta la grave situación de los Ayuntamientos y no se impulsa el desarrollo económico y del empleo en las comarcas».