DONOSTIA

Joxean Muñoz, director general del centro, ­ofreció una rueda de prensa acompañado de la consejera de Cultura Miren Azkarate­, dijo que el primer paso es llegar a una «definición operativa» de los contenidos del nuevo edificio, algo que harán este año porque consideran imprescindible que haya unas «líneas claras» para evitar los «bandazos electorales» si se retrasan las fechas de los comicios municipales de 2007.

La tarea de 2007 sería la de planificar las necesidades espaciales y de uso del edificio, de manera que a final de año se pueda realizar la licitación de las obras. El director de arquitectura del centro, Iñaki Galarraga, sigue viendo grandes posibilidades a la antigua fábrica de tabacos «por tratarse de un inmueble neutro y bien construido, que puede dar un juego importante y, aunque no experimentará un gran cambio de imagen, sí un ‘aggiornamiento’ juvenil».

Las obras de renovación del edificio concluirán en 2010, cuya segunda mitad se dedicaría a su equipamiento para poder inaugurar el CICC en 2011.

Muñoz aclaró, no obstante, que es probable que la reforma pueda llevarse a cabo en fases diferenciadas, lo que haría posible la puesta en marcha de algunos servicios antes de la apertura del conjunto de las instalaciones. Simultáneamente a la rehabilitación arquitectónica, se seleccionará el equipo que trabajará en las diferentes secciones para que, antes de 2011, siente las bases de la programación y las actividades de este centro, que tendrá en la imagen una de sus prioridades.

El consejo de administración del CICC, en el que están también representados el Ayuntamiento de Donostia y la Diputación de Gipuzkoa, ha acordado además prorrogar por un año el contrato con la Fundación Centro Ordóñez Falcón de Fotografía, tiempo que se aprovechará para analizar con detenimiento cuál será la futura vinculación entre las dos entidades.