El deterioro de las prisiones se debe a la reforma penal
·Así lo recoge el informe elaborado por el Ararteko correspondiente al 2005
El Ararteko recoge en su estudio sobre la situación de las prisiones de Martutene, Langraiz y Basauri que el deterioro que padecen sobre todo notable en las dos primeras, se debe al endurecimiento penal, ante lo que solicitó que se evalúen y rectifiquen «determinadas decisiones».
GASTEIZ
La Oficina del Ararteko considera que el deterioro de las prisiones en general, y de las de Langraiz y Martutene en particular, está provocado, entre otras causas, por el aumento de la población reclusa, originado a su vez por el endurecimiento de la legislación penal. El informe correspondiente a 2005 redactado por esta institución recoge un apartado dedicado a la situación de las tres prisiones, después de haberlas visitado y de haber mantenido encuentros con sus directores y con la directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo.
Mayor rigor punitivo
El Ararteko considera que el incremento «incesante» del número de presos no se corresponde con un aumento de la delincuencia, sino que se debe a una serie de reformas legales que «han implicado un mayor rigor punitivo».Por ello, opina que la situación actual de las prisiones, «la pérdida de esperanza» de los presos y la «desmotivación» de muchos profesionales «tienen su origen en las reformas penales, por lo que difícilmente podrán solucionarse si no se enfrentan sus causas». En este sentido, indica que los poderes públicos «deben evaluar y, en su caso, rectificar determinadas decisiones político-criminales». Entre las medidas que, a juicio del Ararteko, deberían revisarse, se encuentran el endurecimiento de los requisitos del tercer grado y la libertad condicional. Asimismo, apunta que es «imprescindible» potenciar las sanciones no privativas de libertad. En cuanto a la situación de las prisiones, al margen de los defectos estructurales de los edificios de Martutene y Langraiz, destaca la carencias de recursos humanos para otorgar un tratamiento individualizado a los reclusos.
Lakua «debe esforzarse»
GARA
GASTEIZ El Ararteko recuerda que la responsabilidad principal recae en Instituciones Penitenciarias, aunque precisa que Lakua debe «esforzarse» para solucionar las «deficiencias» en los servicios que son de su competencia, entre los que cita el traslado de presos o las unidades de custodia especial en los hospitales. Además, insiste en la necesidad de que se impulsen medidas y articulen recursos que incidan en la prevención de delitos, así como en que pongan en marcha centros específicos para personas con enfermedad mental, unidades de régimen abierto o centros de tratamiento de toxicomanías.
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