ATB clausura «de forma arbitraria» el comedor de los trabajadores de Babcock
La dirección de ATB, propietaria de Babcock, clausuró ayer el comedor de los trabajadores. Fuentes del comité consideraron la decisión de «arbitraria». El malestar de la plantilla de bienes de equipo aumenta ante la falta de soluciones de futuro. Abogados de los cinco sindicatos ultiman una demanda para reintegrar a los empleados en la SEPI.
BILBO
La dirección austriaca de Babcock tensó ayer la ya crítica situación por la que atraviesan los trabajadores. Sin aviso previo, clausuró el servicio de comedor de la empresa de bienes de equipo, que también atendía a Productos Tubulares. Fuentes sindicales calificaron el hecho de «decisión arbitraria» y señalaron a GARA que «ese servicio está dentro del convenio y no pueden cerrarlo a su antojo».
El comité presentará una denuncia ante la Inspección de Trabajo ante «la provocación de la dirección». Las centrales sindicales se reunieron con los responsables de ATB y exigieron que se reabra el servicio de comedor, porque «a la empresa que tiene subcontratada, con siete empleados, y a otras cuatro trabajadoras de la plantilla de Babcock les dijeron que no acudiesen a la empresa».
En caso de que persista la cerrazón de la empresa y ésta no revoque su decisión, el comité decidirá junto a la asamblea de trabajadores las medidas de presión necesarias para «evitar esta vulneración de los derechos de los trabajadores». Fuentes del comité denunciaron que la dirección está avivando el clima de tensión, dado que «no son capaces de buscar una solución de futuro para la empresa. Lejos de traer trabajo, lo que están haciendo es cerrar las instalaciones y buscar el conflicto por el conflicto».
Por otro lado, los abogados de las cinco centrales sindicales que componen el comité de empresa UGT, CCOO, ELA, ESK y LAB están ultimando una demanda judicial para conseguir que la plantilla actual de trabajadores se integre en la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), ya que, tras dos privatizaciones fallidas, el futuro de los empleados es incierto.
En los próximos días, el comité de empresa elegirá a su nuevo presidente, tras la dimisión de Alfredo Laureiro, por no aceptar la decisión de la asamblea de iniciar movilizaciones ante la pasividad de la Administración en la búsqueda de una salida al conflicto.
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