La recogida de paja afecta a especies de fauna protegida
La forma en que se realiza la recogida de cereal y de la paja en los campos inciden de forma negativa sobre la fauna silvestre, incluso en especies protegidas, según la Asociación de Cazadores Navarros (Adecana). La destrucción de nidos, la succión de ejemplares y sus crías y la desaparición de la cobertura vegetal son los principales impactos.
IRUÑEA
La única legislación aplicable en Nafarroa sobre la recogida y empacado de paja viene regulada en una resolución de abril de 2000 del director general de Medio Ambiente, en la que formuló la declaración de impacto ambiental del proyecto de planta de biomasa en Rocaforte-Zangoza. Aquella declaración incluía una serie de actividades a realizar para minimizar el impacto medioambiental de la retirada de la paja, teniendo en cuenta que la desaparición de la cobertura vegetal resulta muy necesaria para la defensa de muchas especies animales.
Dicha resolución, en su apartado de impactos derivados de la gestión de la paja, establece que la empresa propietaria de la planta de biomasa (antes EHN y ahora Acciona) debe tener en cuenta una serie de prácticas para que la recogida de la paja utilizada como combustible no tenga un impacto significativo sobre la fauna.
En concreto, establece la necesidad de respetar un periodo no inferior a diez días entre la cosecha y la recogida de la paja; instalar en las cosechadoras dispositivos espanta fauna; recoger la paja del centro hacia el exterior de la parcela y no recoger la paja durante la noche.
«No se está aplicando»
«Además de que dicha resolución no se está aplicando constata Adecana sólo afecta a la recogida de la paja que tiene como destino la citada planta de biomasa, por lo que existe todo un vacío legal en el resto de los supuestos, que son el resto de los campos navarros cuya paja no se destina a esa planta».
Adecana recuerda que todos los años solicita al Departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Nafarroa el correspondiente informe anual del cumplimiento de estos condicionantes, y ha comprobado que «en líneas generales no se cumplen los apartados obligatorios, con el perjuicio que ello está conllevando a la fauna».
La empresa semipública Viveros y Repoblaciones ha realizado un estudio sobre el efecto del empacado de paja en la fauna cinegética. «Tal como suponiamos dice Adecana, sus resultados preliminares son más que preocupantes».
La empacadora se lleva las codornices
GARA
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«Menos de la mitad de las codornices que se encuentran en el campo escapan a la empacadora, y las que lo hacen pueden ser empacadas tras el agotamiento del segundo vuelo». Esta es una de las conclusiones del estudio realizado por Viveros y Repoblaciones, en el que se incluyen una serie de recomendaciones para tratar de evitar la muerte de estas y otras aves.
Algunas propuestas
Así, propone potenciar los cultivos alternativos, mantener un patrón de cosecha y empacado, prohibir el uso nocturno de cosechadoras y empacadoras, limitar el uso del rastrillo, mantener bandas sin cosechar, dejar paja en el campo y profundizar en el estudio del impacto de las prácticas agrícolas en la fauna silvestre.
Por su parte, Adecana pide que la Administración elabore una legislación que fije las pautas a seguir por los agricultores con respecto a la recolección de cereales y otros productos, a fin de proteger especies cinegéticas como codornices, perdices, conejos y liebres, «que están viéndose seriamente afectadas por este penoso y triste asunto».
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