Identifican a 203 muertos en Ezkaba y piden ayuda para localizar sus restos
El trabajo de hormiga de algunas asociaciones para tratar de sacar a la luz lo ocurrido en la guerra del 36 va dando frutos poco a poco. La Asociación de Familiares de Fusilados y el colectivo Txinparta de Antsoain han podido constatar la fecha de muerte y el municipio en que fueron enterrados otros 203 presos muertos en el penal de Ezkaba. Reclaman ahora ayuda para poder llegar al punto concreto en que se depositaron sus restos. Y aseguran que es posible.
IRUÑEA
El redescubrimiento de la historia oculta del penal franquista de Ezkaba, donde se produjo la trágica fuga masiva de 1938, no deja de deparar noticias. La Asociación de Familiares de Fusilados de Navarra y Txinparta, colectivo de la vecina localidad de Antsoain, informaron ayer de que en su investiga- ción por diversos archivos han logrado detectar la localidad en la que fueron enterrados 203 presos del fuerte, así como su identidad, procedencia y fecha de fallecimiento.Poco más se conoce de momento. El motivo exacto de las muertes, por ejemplo, no queda constatado en los archivos, aunque Koldo Pla, de Txinparta, indicó como ejemplo significativo que «el 1 de noviembre de 1936, a las 8.00, hubo 21 fallecidos. Y evidentemente, no se habrían caído de un andamio». Los datos ahora conocidos sobre estos 203 prisioneros constaban en el Archivo Diocesano y en el Registro Civil. Al parecer, se trata de represaliados republicanos que perdieron la vida en el penal y que, como quiera que todavía no se había construido el cementerio recientemente descubierto, fueron enterrados en diferentes pueblos de la comarca. Se desconoce, sin embargo, si lo fueron en cementerios o en fosas comunes. Y por eso se reclama la colaboración de los vecinos de más edad. El miembro de Txinparta subrayó que llegar hasta los enterramientos no es una utopía, como demuestra la experiencia de estos últimos meses. «Hemos recibido información con pelos y señales por parte de personas que, además, nos reconocían que era la primera vez que hablaban de esto», indicó Koldo Pla.
De todas las procedencias
El descubrimiento confirma que a la cárcel franquista ubicada en el fuerte de San Cristóbal del monte Ezkaba habían ido a parar republicanos de todos los sitios. Así, entre los 203 fallecidos de los que hay noticia ahora sólo hay cinco navarros y 25 presos de otros herrialdes vascos, junto a 67 procedentes de lo que hoy es Castilla-León, 30 gallegos, 17 madrileños... Yhabía incluso republicanos de Argentina, Cuba o Venezuela.La Asociación de Familiares de Fusilados y Txinparta darán ahora máxima difusión a estos nombres, para tratar de que lleguen a conocimiento de sus descendientes. Joseba Ezeolaza, representante de la asociación, subrayó la dificultad «increíble» de esta labor y apuntó que «este tipo de trabajo no lo tenemos que hacer nosotros», por lo que reclamó implicación institucional. Para Ezeolaza, «negarse ahora a realizar el trabajo de la memoria histórica es dar por bueno el paradigma de vencedores y vencidos. Para pasar página hay que haberla leído antes».
«¿A qué esperaban?»
Con la identificación y localización aproximada de estos 203 fallecidos en Ezkaba, son ya 333 los presos muertos de los que consta su identidad (en el cementerio hallado junto al penal hay restos de otros 130). Pero se supone que siguen sin aparecer cerca de 400 desaparecidos, entre ellos los más de 200 fusilados tras la épica fuga.Fuentes del Ejército español trataron de descalificar el reciente hallazgo de este cementerio de Ezkaba asegurando que su existencia ya estaba detallada en los archivos militares. Ahora quizás alguien vuelva a emplear este argumento. Ezeolaza se adelantó a ello para reivindicar que «se trata de descubrimientos mientras las familias no conozcan esos datos. Lo que quieren, básicamente, es saber». Consideró, al hilo de ello, que «es entendible que esos archivos estuvieran ocultos durante 40 años, pero no en 28 años de democracia. ¿A qué esperaban para sacarlos?».
Homenaje a los gudaris en Usurbil
USURBIL El 17 de setiembre de 1936, las tropas franquistas entraban en Usurbil. Ese mismo día, pero 70 años después, la localidad guipuzcoana brindará un homenaje a los gudaris que les combatieron, de la mano de la sociedad Aitzaga, que cuenta para ello con la colaboración del Ayuntamiento. Los actos del domingo se iniciarán a las 10.00 con la izada de la ikurriña en el monte Bordatxo, tras una marcha que se iniciará en el frontón. Posteriormente, a las 12.30, se llevará a cabo la parte central del homenaje en la plaza Askatasuna, con la participación, entre otros, de Joseba Tapia, que cantará varias canciones de aquella época. Se colocará además una placa recordatoria y tendrá lugar un pequeño aperitivo. En torno a esta fecha se proyectan además en Usurbil las películas ‘‘Tierra y libertad’’ (anunciada anteayer) y ‘‘Lauaxeta, lau haizetara’’ (el día 19), y el día 21 el historiador Iñaki Egaña ofrecerá una charla que lleva por lema «Gerra zibila Usurbilen eta inguruan». Homenajes similares se están celebrando en múltiples puntos. El próximo sába- do se hará en Agoitz.
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