BILBO
Carlos Gurpegi se confesó ayer contrariado por las acusaciones que llegan desde Cádiz en torno a la jugada en la que Matías Pavoni resultó lesionado.«Fue una jugada accidental subrayó el navarro. Se está especulando que si yo había intentado hacerle daño o que iba a por él, pero en ningún momento quiero hacerle daño». Gurpegi insistió en que se trataba de «la primera jugada del partido y yo en ningún momento intento hacerle daño ni voy a por su pierna. Le doy al balón y luego con la pierna pues igual le doy a la suya».
El de Andosilla, por otra parte, desveló que tanto él como el Athletic han enviado sendos telegramas al jugador «para darle ánimos y desearle que se recupere cuanto antes».
El «caso Giovanella»
Lo cierto es que entre esta polémica y el «caso Giovanella», la semana está resultando «un poco revoltosa» para un Carlos Gurpegi que intenta «mantenerme al margen» para no perder la concentración.Gurpegi lamentó que siempre que se dan este tipo de situaciones «aparece mi nombre», así como que Everton Giovanella esté padeciendo una experiencia similar a la suya. «Está sufriendo el mismo atropello que yo sufrí en su día. Lo que parece es que, como ahora estoy jugando, a mí no me pasó nada. Pero entre Comité y Comité yo estuve tres meses o tres meses y medio sin poder jugar. Parece que todo el mundo ha olvidado eso», destacó.