- El Tau, a un paso de la calsificación para cuartos de la euroliga -
Evita el tropiezo y despeja el camino
·El Baskonia rompió el choque con un demoledor 22-6 en el primer cuarto para acopiar fuerzas para mayores retos
TAU BASKONIA 71
BAMBERG
51
GASTEIZ
El Baskonia dio ayer un gran paso en su camino hacia Praga al evitar el siniestro total que hubiera supuesto una derrota ante el Bamberg y con la victoria del CSKA sobre el Lietuvos Rytas, que deja a los de Perasovic virtualmente en cuartos salvo hecatombe en los dos próximos choques ante rusos y lituanos. Una victoria en Vilnius la próxima semana supondría la certificación del pase y la opción de ser primeros en caso de superar el basket average ahora de -6 ante el CSKA en el último partido del grupo. Romper para dejarse llevar. Ese podría ser el mejor y el único resumen posible del partido sin historia jugado ayer en Zurbano entre el Baskonia y un Bamberg que dio su peor imagen de los cuatro emparejamientos ante los gasteiztarras, lastrado por las significativas bajas de Archibong y Hamann. Los de Perasovic venían muy mentalizados para evitar sorpresas y decidieron el partido en un primer cuarto demoledor, en el que los seis puntos de anotación y el -7 de valoración del equipo de Bauerman hablan pos sí solos. Liderados en ataque por un Casey Jacobsen que volvió a demostrar su clase y un Vidal que salió en el quinteto titular por primera vez en mucho tiempo, el 12-2 en los primeros cinco minutos y el 22-6 del primer cuarto dictaron sentencia. Siendo un partido en el que lo único importante era evitar el siniestro total en forma de tropiezo, con las gradas menos llenas que nunca y ante un rival que también tenía la mente en otros retos, el Baskonia se dejó llevar en el resto de cuartos, acopiando fuerzas para retos más importantes. Perasovic aprovechó la oportunidad para dar minutos a los menos habituales como Chalmers, Ukic que jugó de escolta con el americano de base y Drobnjak, voluntarioso y con el público entregado, que lejos de mantener el demoledor ritmo del primer cuarto, buscaron más el lucimiento personal para adornarse en sus números tras tantos minutos de banquillo. La arenga de Perasovic en el descanso sirvió para que alcanzaran su máxima diferencia hasta los 24 puntos con otro triple de Jacobsen pero, enfrascados en un calendario infernal, ni los baskonistas estaban para mucho espectáculo ni los alemanes para exigir nada y los minutos pasaron sin más.
«Defender la diferencia sería un suicidio»
J.O
GASTEIZ Velimir Perasovic reconoció ayer que el Baskonia dio un gran paso con su victoria y la del CSKA ante el Lietuvos, pero no quiere echar las campanas al vuelo. «Hay que ir a Lietuvos a intentar ganar partido como sea, porque ir a defender diferencia sería un suicidio. Tenemos capacidad para ganar ese partido y luego depender de nosotros en la última jornada. No está nada hecho, hemos encarrilado el camino peor no hemos terminado el trabajo». En su análisis del partido, el croata dijo que «en el primer cuarto ya hemos hecho gran parte de los deberes y después fue todo bastante más fácil. Fue una oportunidad de dejar descansar a jugadores que normalmente juegan más. Pero los alemanes no se rinden nunca, otro equipo se rendiría pero ellos, sin un acierto bueno, han jugado muy duro, muy peleones y nunca te puedes relajar 100%. Este equipo, de verdad tiene casta». Del rendimiento de los menos habituales señaló que, «todos han puesto coraje, con más o menos acierto, lo importante es que entren en dinámica y que mejoren cada día, porque vamos a necesitarles». Splitter sufre un fuerte golpe en la espalda
Sin duda, el aspecto más negativo de la jornada de ayer fue el golpe en la espalda que sufrió Tiago Splitter en el segundo cuarto al saltar por un rebote, que le impidió seguir jugando. El brasileño tiene bastante inflamada la zona y sufre fuertes dolores que le hacen ser seria duda para el partido del domingo ante el Unicaja. Ayer en el pabellón no hubo un primer diagnóstico y hoy será sometido a pruebas médicas que den el alcance real de su lesión.-
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