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El portavoz de la Diputación de Gipuzkoa, Koldo Azkoitia, considera «totalmente comprensible» el enfado de los conductores tras tener que sufrir un atasco de más de 30 kilómetros por el vuelco el martes de un camión en la N-I a la altura de Andoain y señaló que la institución foral «trabaja para ofrecer vías alternativas», al tiempo que apeló a la «responsabilidad» de los usuarios de las carreteras.
Azkoitia calificó de «grave problema» el gran atasco derivado del cruce de un camión a primera hora de la tarde del martes en las curvas de Bazkardo, el cual volcó toda su carga y provocó el corte de la
circulación de los dos carriles. El portavoz foral explicó que con la activación del protocolo de actuación a este nivel se liberó «relativamente rápido» un carril, «pero un carril no es suficiente para activar la densidad de tráfico que aguanta la N-I», reconoció.
Recordó que la entidad foral «está trabajando para ofrecer vías alternativas» y se refirió a la variante de Andoain que «dentro de lo que es el corredor del Urumea, unido al segundo cinturón, permitirá acabadas las obras, tener una alternativa al tramo entre Andoain y San Sebastián de la N-I». No obstante, reiteró la apelación a todos los conductores a que «asuman la responsabilidad que les toca» e instó a respetar las señales de tráfico, «que están para algo». Asimismo, hizo un llamamiento «específico y concreto» para vehículos de gran tonelaje.
Azkoitia señaló que la red de alta capacidad de Gipuzkoa, que está en ejecución, «sí que contempla alternativas de paso para que no sucedan problemas como el de ayer por el martes en la N-I. El desdoblamiento a seis carriles de la A-8, la entrada en funcionamiento en toda su extensión de la AP-1 constituirán un eje alternativo importante donde poder recanalizar ese tráfico».
