BRUSELAS
Casi un centenar de compañías, principalmente africanas y algunas asiáticas, tendrán prohibido volar en todo el territorio de la Unión Europea a partir de comienzos de abril, al haber sido incluidas en la primera «lista negra» de aerolíneas peligrosas, hecha pública ayer por la Comisión Europea. La relación, presentada por el comisario europeo de Transportes, Jacques Barrot, contiene 96 compañías, de las que 92 tienen totalmente prohibido operar en la Unión y 4 estarán sometidas a restricciones.
La Comisión dio ayer el visto bueno a la lista que había preparado el comité regulador en materia de seguridad, integrado por expertos de ditintos países, y que se basaron en las contribuciones realizadas por los 25 estados miembros.
Entre las aerolíneas prohibidas están todas las de la República Democrática del Congo (un total de 50); Guinea Ecuatorial (11); Liberia (3); Sierra Leona (13); y Suazilandia (6).
Asimismo hay 2 de Kazajistán, 2 de Kirguizistán y una de Corea del norte, Comores, Afganistán, Tailandia y Ruanda.
Las sometidas a restricciones no poder usar ciertos aparatos o modelos son una compañía de Bangladesh, dos de Libia y otra de la República Democrática del Congo.
Coincidencias
Entre las compañías incluidas en la relación están las que ya aparecían en el listado del Estado francés, que era público: la tailandesa Phuket Airlines, la liberiana International Air Services, la norcoreana Air Koryo y la comorense Air Comores Services. El comisario explicó que con la elaboración de esta lista, la Unión Europea «tiene ahora un enfoque coherente en la prohibición de aerolíneas» que no cumplen los requisitos de seguridad comunitarios. «Esta lista mantendrá lejos de Europa las compañías dudosas. También garantizará que todas las aerolíneas en el cielo de Europa cumplen los más altos estándares de seguridad», agregó.
Las aerolíneas que hay en esta primera «lista negra» constituida por la Comisión europea, han sido incluidas por presentar «graves deficiencias» en materia de seguridad y no haber adoptado las medidas suficientes para solucionar esos problemas.
La lista será revisada cada tres meses y para decidir si una compañía es peligrosa, se han establecido una serie de criterios comunes.
