¿Quieren ver cómo se puede hacer el ridículo más espantoso y seguir saliendo a la calle como si nada hubiera pasado? Acudan al quiosko más próximo y compren la edición de “Abc” de ayer. Bueno, ahorren el euro y se lo cuento yo misma.

En su edición del histórico 22 de marzo, la cabecera madrileña del Grupo Vocento editorializaba en plan Nostradamus. Y, evidentemente, se la pegaba: «La dinámica de especulaciones y expectativas, por ahora fallidas, sobre el llamado proceso de paz está provocando un deterioro político creciente en el Gobierno, en el PSOE y en algunas instituciones que, como la Fiscalía General del Estado, deberían permanecer al margen de la contienda partidista. La ausencia de ‘gestos’ o treguas por parte de ETA se está traduciendo en una evidente ansiedad en el Ejecutivo y en ciertos sectores del PSOE, cuyo discurso sobre ‘el principio del fin’ no se ve acompañado por hechos confirmatorios. El último comunicado de ETA, difundido a través del diario GARA es un nuevo enfriamiento de los ánimos socialistas, que están asimilando mal el control de tiempos que imponen los terroristas». Qué gracioso es leer sus análisis a la luz de los nuevos hechos conocidos ayer....

Su mayor problema es que confunden deseos con realidades y eso le lleva a Zarzalejos (facha de la fachenda más fachosa de toda la fachosidad, no se equivoquen) y así centra el problema en «la confusión socialista que se traduce no en una rectificación, cada día más urgente, sino en una campaña contra el PP y el juez Grande-Marlaska». Ciegos de odio (y de temor al mismo tiempo), los analistas de la fachenda se rasgan las vestiduras porque «resulta lamentable que, después de que el Tribunal Supremo haya ilegalizado a Batasuna y de que la Audiencia Nacional haya procesado e imputado por varios delitos a Arnaldo Otegi, el socialismo vasco salga en defensa de este personaje que no hace mucho calificaba como ‘politiquería’ la petición de tregua a ETA o reconocía en noviembre de 2001 que ‘la izquierda abertzale colaborará para superar el conflicto, pero nunca irá contra ETA’».

Y ahora, la gran metedura de zancarrón: «Sin embargo, son los hechos los que vuelven a desmentir tanto al Ejecutivo como al PSOE o al fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido. Mientras, ETA sigue a lo suyo: poniendo bombas, extorsionando en masa a la clase empresarial, atacando sedes judiciales y coaccionando de forma creciente a los no nacionalistas. El último, un edil socialista de Rentería, cuyo domicilio fue atacado ayer mismo con cócteles molotov». Y hoy saldrán a pasearse por la Castellana tan anchos. Un tanto desconcertados, si cabe, pero estén seguras y seguros de que buscarán un término para darle la vuelta a todo. Mayor Oreja ­que no es Hans Christian Andersen, precisamente­ ideó el término «tregua-trampa». A ver qué se les ocurre hoy. Mañana volveremos. - msoroa@gara.net