LONDRES
Expertos de la Escuela Médica Península en Devon revisaron 26 estudios fechados entre 2000 y 2005. En un artículo publicado en la Revista de la Sociedad Real de Medicina, los investigadores dicen que los datos que obtuvieron muestran «poca evidencia» de efectividad.Los quiroprácticos, sin embargo, indican que el análisis se centró en «estudios negativos» que apoyan la opinión de los investigadores. «En quiropraxia no tratamos síntomas, o curamos enfermedades», dijo a BBC Mundo María Silvia Leuca, de la Asociación Quiropráctica Argentina. «Lo que busca la quiropraxia es devolverle al cuerpo la capacidad de funcionar por sí solo a través de la liberación del sistema nervioso», señala. Agrega que estudios así buscan «dar miedo a las personas que han logrado mantener su salud con la quiropraxia».
El estudio británico analizó estudios que evaluaban los beneficios de la manipulación vertebral para tratar dolor menstrual, cólico, asma, alergias, mareos y dolor de cuello y espalda. «El objetivo principal de la quiropraxia dice Silvia Leuca es la corrección de las subluxaciones vertebrales, es decir cuando se produce una movilización de una vértebra y a su vez interfiere en un impulso nervioso». La manipulación vertebral involucra provocar movimientos en la columna vertebral del paciente.
Estos movimientos, que a menudo son rápidos y cortos, afectan principalmente a una vértebra y la intención es recolocar la vértebra en su posición correcta o provocar la relajación de los músculos y ligamentos. Los investigadores indican que los datos que encontraron no mostraron que la manipulación vertebral era efectiva para ninguno de los trastornos, con excepción del dolor de espalda. Pero incluso con el dolor de espalda, la manipulación no demostró ser mejor que los tratamientos convencionales.
Según los investigadores, la manipulación vertebral ha sido vinculada a efectos secundarios leves en cerca de la mitad de los pacientes. Estos incluyen rigidez, y en raras ocasiones, apoplejías provocadas por daños a la arteria glútea. Es por eso, dicen, que es preferible utilizar otras terapias en lugar de la manipulación vertebral.
El estudio sugiere que, a la luz de estas conclusiones, las directrices existentes necesitan ser revaluadas. Según el profesor Edzard Ernst, quien dirigió la investigación, «existe poca evidencia de que la manipulación vertebral es efectiva como tratamiento de alguna condición médica».
Los investigadores dicen que sus hallazgos son «preocupantes» porque en Gran Bretaña, así como en otros países, los osteópatas y quiroprácticos están reconocidos oficialmente. «Los pacientes y el público en general perciben la regulación legal como prueba de la utilidad del tratamiento», señala el especialista. Y agrega que sin embargo, sus hallazgos muestran «una contradicción entre la efectividad de la intervención y la evidencia».
Según el profesor Ernst, este estudio debe verse como «un llamado de atención» a la profesión quiropráctica. Indica que un avance sería llevar a cabo ensayos clínicos más rigurosos para probar la efectividad de la manipulación vertebral.
El paciente lo ve en el día a día
Los quiroprácticos, sin embargo, discrepan. Como señala Silvia Leuca, «en Argentina los únicos capacitados para ejercer quiropraxia somos licenciados en kinesiología y fisioterapia y tenemos manejo y conocimiento biomecánico del cuerpo».«Yo no mido a la quiropraxia en estudios, la mido en el bienestar general de mis pacientes y lo que ellos me refieren», señala la especialista. «Ellos lo ven día a día, desde no poder caminar hasta caminar una o tres cuadras, o de ver cómo mejora su circulación, o lograr un mejor descanso», dijo.