Iberdrola confía en la OPA de Gas Natural para crecer más
Iñigo Oriol, presidente saliente, e Ignacio Sánchez Galán, próximo responsable de Iberdrola, insistieron ayer ante la Junta de Accionistas que el acuerdo firmado con Gas Natural, si triunfa su OPA sobre Endesa, «permitirá crecer más y expandirnos en Latinoamérica e Italia». En el Palacio Euskalduna, los accionistas dieron el visto bueno a que la compañía amplíe el capital social para comprar los nuevos activos.
BILBO
La Junta General de Accionistas de Iberdrola trascurrió con normalidad y, tras una fría acogida, llegó una calurosa despedida al presidente, Iñigo Oriol, que se jubila a los 70 años.Tres fueron los elementos que centraron los discursos en la asamblea de accionistas. La marcha del presidente Iñigo Oriol, tras veintiún años en la presidencia y 35 años desde que entró al consejo de administración de la compañía, en primer lugar. La nueva situación que tendrá la compañía si sale adelante la OPA de Gas Natural sobre Endesa, en segundo lugar, lo que permitirá a Iberdrola adquirir activos eléctricos, de distribución y suministro que fortalecerían el peso específico de la multinacional eléctrica de origen vasco. La regulación del mercado eléctrico, en tercer lugar, por parte del Gobierno español centró el mejor año económico y de resultados de Iberdrola que, por otra parte, ha pagado a sus máximos responsables los sueldos más elevados, entre retribución fija y variable. Oriol y Sánchez Galán percibieron el año pasado más de dos millones de euros cada uno, a los que hay que sumar las cantidades por las primas de accidentes y de pensiones. Al término del contrato de servicios que tiene estipulado Iñigo Oriol percibirá 7,5 millones de indemnización. Los diecinueve miembros del consejo de administración se repartieron 8,2 millones en compensaciones, además de dietas y compensaciones para sus planes de pensiones. Asimismo, hay que tener en cuenta que el año pasado los dos máximos responsables de la compañía se comprometieron a distribuir 60 millones a los 400 directivos, si se cumplían los objetivos del plan estratégico. Ante los accionistas, Ignacio Sánchez Galán reconoció que se han anticipado en un año en la consecución de los objetivos del plan. De hecho, a la vuelta de las vacaciones de verano, se elaborará otro, que «marcará la senda de crecimiento orgánico de Iberdrola, como lo hemos hecho hasta la fecha», según dijo el consejero delegado y sustituto de Oriol desde el próximo 26 de abril. Ni Oriol, en su despedida, ni Sánchez Galán desechan que Gas Natural lleve adelante la OPAsobre Endesa, a pesar de la presión de E.ON, lo que permitiría a Iberdrola maximizar el crecimiento, dado que la Junta de Accionistas dio luz verde a que en los próximos cinco años se pueda ampliar el capital social para acometer la compra de activos de los que tendría que desembarazarse Gas Natural si fusiona a Endesa. Son entre 7.000 y 9.000 millones. «Nos permitirá participar, en condiciones de mercado, en las desinversiones que se produjesen», señaló el presidente de Iberdrola, quien llamó la atención sobre las trabas que en esa OPAse está encontrando Gas Natural y criticó, en cambio, las disposiciones «asimétricas» en otros países de la Unión Europea, que permiten a sus empresas fortalecerse «sin inconvenientes». En este caso, Ignacio Sánchez Galán aseguró que «si se puede materializar la transacción ésta permitiría a Iberdrola consolidar su proyecto empresarial en España, con la incorporación de nueva potencia; entrar en nuevos negocios regulados, como la la distribución de gas y la generación y la distribución eléctrica y gasista en Baleares».
Estado francés e Italia
El consejero delegado desveló ante los accionistas que el acuerdo con Gas Natural permitirá, a la vez, comprar activos en el Estado francés y en Italia y «se analizará la posibilidad de comprar activos en Latinoamérica, lo que contribuiría a aumentar la presencia internacional de Iberdrola, sin duda alguna». La regulación del mercado eléctrico «va en la dirección correcta», según explicó el consejero delegado, pero pidió que se desarrolle con una cierta urgencia los decretos reguladores, porque, como ya indicó el día anterior, «tendríamos que replantearnos algunas inversiones para garantizar nuestro crecimiento y que ustedes, los accionistas, no pierdan valor». También recordó que el precio de la energía eléctrica en el Estado español es baja, por lo que aventuró que «es necesario adecuarlo». De hecho, una accionista reclamó a los responsables de Iberdrola que «no produzcan energía a un coste inferior a lo estipulado en el mercado». Hubo una intervención sorprendente a cargo del responsable del comité de empresa por UGT, Jesús San Sebastián, quien destacó las buena relaciones laborales que existen dentro de la compañía y, aunque reconoció los problemas que hay con la subcontratación y la salud laboral, los directivos agradecieron esa muestra de apoyo.
Ni se fusionó con Endesa ni pudo llevar la sede a Madrid
J. BASTERRA
BILBO Iñigo Oriol e Ybarra, «aristócrata de la vieja guardia», se jubila a los setenta años. Lleva desde 1959 ligado a la actividad empresarial. En 1975 entró en el consejo de administración de Hidroeléctrica y desde ahí saltó a la presidencia en 1985, cuando falleció su padre José María Oriol. En 1991 protagonizó la fusión con Iberduero, que dio origen a Iberdrola. Trató sin éxito comprar la eléctrica estadounidense Florida Powers y en 2001 no logró la fusión con Endesa. Se mantuvo activo para lograr ese paso, pero la operación se frustró porque los pequeños accionistas y algunos fondos de inversión estadounidenses no vieron esa operación como necesaria. Detrás de la misma, Oriol buscó eliminar de Bilbo el domicilio fiscal de la compañía. No dio resultado, ni tampoco otro intento en 2003 de Gas Natural. El mayor éxito de Oriol fue nombrar a Ignacio Sánchez Galán como consejero delegado en 2001, tras el fiasco con Endesa. En tan sólo cinco años, Oriol propuso a Sánchez Galán para ocupar la presidencia.
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