GARA
IRUÑEA
El Portland San Antonio afronta hoy en el Pabellón Universitario (17.20, La 2) el partido de vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones con el reto de remontar al Veszprem húngaro dos goles, tras perder en la ida por 29-27, para tratar de alcanzar su tercera final.
El conjunto antoniano confía en que su potencial y el factor cancha contará con 3.000 aficionados que llenarán el pabellón sean argumentos suficientes para batir al Veszprem y pasar la eliminatoria.
No obstante, el Portland afronta el choque con dos bajas importantes, la de su capitán Mateo Garralda, lesionado en la mano, y la del pivote esloveno Zoran Lubej, sancionado por la EHF con un partido por la tarjeta roja que vio en los últimos segundos del encuentro disputado en Hungría.
Zupo Ekisoain podrá contar con Demetrio Lozano, una vez superadas sus molestias en el pulgar de la mano derecha, así como con el extremo Ricardo Andorinho y el lateral Lasse Boesen, quienes han recibido el alta médica esta semana.
Consciente de la dificultad que entraña el duelo, aunque confiado en la remontada, Ekisoain afronta el partido con mucho respeto: «El objetivo es ganar al Veszprem por más de dos goles, pero que nadie piense que esto está hecho de antemano porque se equivoca». «El entorno está convencido de que ya estamos en la final y ni mucho menos, porque al Veszprem hay que respetarle mucho y no va a ser un equipo fácil de superar. Ellos no van a venir a especular sino a ganar y más sabiendo que hay dos hombres importantes como Garralda y Lubej que no van a jugar», subrayó el entrenador.
En opinión del técnico navarro, el ambiente y la presión del público sobre el Veszprem y la pareja arbitral eslovena Repensek y Pozeznik puede ser fundamental de cara al desenlace de la eliminatoria.
«La afición va a jugar un papel muy importante y tienen que estar alerta por la dureza del equipo contrario, presionar sobre ellos y los árbitros porque el Veszprem no creo que baje su intensidad respecto a Hungría», pronosticó. El conjunto húngaro, que tendrá el respaldo de unos 150 aficionados, baja su nivel fuera de casa, aunque Ekisoain no se fía: «En Europa el factor pista es importante y ahora nosotros lo tenemos de mano pero, así como en Veszprem nosotros salimos vivos, ellos también pueden hacerlo aquí. Es un equipo con una defensa muy dura, al límite de reglamento y nos podemos llevar un susto. Cuentan con una buena portería, salen bien al contraataque y tienen lanzadores de calidad», informó.