KIEV
El presidente de Ucrania, Víctor Yuschenko, exigió a sus aliados del campo «naranja» que dejen a un lado sus peleas por el reparto de carteras y que formen una coalición de Gobierno. En un mensaje difundido por radio, Yuschenko confirmó públicamente por vez primera que la coalición gobernante debe integrar a «todas las fuerzas que juntas lucharon por la democracia en la Plaza de la Independencia de Kiev» a finales de 2004 y que derrocaron al anterior Gobierno electo.
Esta petición parece indicar que el presidente ha descartado la posibilidad de pedir a Viktor Yanukovich, vencedor de las elecciones, que forme Gabinete. El partido del candidato prorruso fue la fuerza más votada, pero no consiguió la mayoría absoluta. Los dos partidos promotores de la revolución naranja, en cambio, sí que suman suficientes apoyos para formar un Gobierno estable. No obstante, esta opción supone que Yulia Timoshenko lideraría el Gobierno, algo que Yushenko no ve con buenos ojos.
Cesión ante Timoshenko
Las fuerzas aliadas durante la revolución naranja se dividieron cuando Yuschenko destituyó a Timoshenko como primera ministra en setiembre pasado, pero parece que Yushenko prefiere reeditar la fallida alianza naranja antes que reconocer la victoria de Yanukovich.
Timoshenko había advertido que no aceptará ningún cargo que no sea el de jefa de Gobierno, y que su partido se pasará a la oposición en caso de que Yuschenko pacte con Yanukovich. Pese a decantarse por los naranjas, Yushenko también hizo un guiño a Yanukovich. «Espero que las fuerzas políticas que formen la futura coalición sean lo suficientemente sensatas para dejar de identificarse con un sólo color y trabajar en la unificación de todo el país», sentenció.