Construcción autoritaria del Capitalismo de Excepción Europeo: Stop. El proletariado del Estado vecino, sobreponiéndose a la movilidad y a la fragmentación, ha tomado la calle; también en Iparralde. La república neoliberal francesa está tocada. En la retina el estallido de los suburbios.
Francia inaugura el milenio a la deriva. Ascenso de la derecha xenófoba. Recorte de pensiones. Contraofensiva municipalista de izquierdas. Negativa a la Constitución Europea. Amotinamiento de la República. Estado de excepción. Medidas inmigratorias selectivas. Y reforma laboral neo esclavista CPE, CNE y Ley de Igualdad de Oportunidades que favorece largos periodos de prueba y despidos sin indemnización antes de los veintiséis años, la formación laboral para los menores de catorce y la posibilidad de desempeñar un trabajo nocturno a partir de la quincena.
Desde que el primer ministro presentara el Contrato de Primer Empleo, se han sucedido cinco jornadas de movilización general. Infinidad de manifestaciones. Ocupaciones. Paros en el transporte. Batallas con centenares de detenidos. Bloqueos de universidades e institutos. Y asambleas en centros oficiales, fábricas y plazas. A pesar de las maniobras dilatorias de partidos, sindicatos y asociaciones estudiantiles se constata la existencia de una autoorganización que enfrenta la precariedad del mercado laboral y la ampliación de la exclusión social impuesta por el gobierno de la burguesía empresarial.
El detonante de la protesta no surge de la intersindical, sino del desalojo de la Sorbona por los CRS. Una ocupación que, negativa al CPE, expande las barricadas por el Barrio Latino. La contabilidad de las agresiones activa la conciencia. Cherche Pingeon à Exploiter, reza una consigna en Baiona. El Comité de Movilización de París X Nanterre exige la amnistía para los arrestados.
Villepin se empecina. Beneplácito MEDEF. Chirac avala según circunstancias. Y Sarkozy tolerancia 0 pretende reconducir la crisis; propone componendas a las fuerzas sindicales con el objetivo de paralizar al movimiento. Piezas de rompecabezas.
Los recuperadores dirigen resabiados el cortejo de novatos. Aceptan la retirada del CPE como condición para negociar. Interponen sus servicios de orden. Y no llaman a la Huelga General. Tienen pánico a la politización de las fuerzas sociales y juveniles, a las alianzas que pueden entablar estudiantes airados, proletarios precarios y sectores periféricos, y a que la confrontación les deje fuera de juego. La contradicción se reproduce en una lucha de clases que teje su malla en forma de redes. El nuevo proletariado emerge. ¡Vive la France, vive Europa! -