BAIONA
Dos presos vascos llegaron a Madrid ayer después de ser extraditados o entregados por las autoridades francesas. Se trata de Xangarin Rekondo, que ya ha cumplido condena en las prisiones galas, y de Gregorio Vicario, a quien se ha entregado de forma temporal para ser juzgado por varias causas antes de ser devuelto al Estado francés.
A Rekondo se le ha aplicado una euroorden después de haber cumplido toda la pena impuesta en París en la cárcel de Tarascon. El pasado 29 de marzo fue llevado a Marsella, y posteriormente a Fresnes, desde donde se le envió ayer a Madrid, según explicó Askatasuna.
Anteriormente, el joven había sido detenido en Toulouse (en 2003), junto a una farmacia ya que se encontraba herido de bala.
En el caso de Gregorio Vicario Setien, se trata de una nueva entrega con carácter temporal, que permitirá juzgarle en la Audiencia Nacional española por varias causas. Cuando esto ocurra, será devuelto a las autoridades francesas para cumplir la pena de dieciocho años de cárcel que se le impuso en su día.
Hasta ahora ha permanecido en Poissy, según recordó Askatasuna. Su captura se produjo hace ya cinco años en las cercanías de Grenoble, y se le acusó de participar en un importante robo de explosivos ocurrido en las inmediaciones.
Agencias españolas remarcaron que se trata de las dos primeras entregas o extradiciones ejecutadas por el Estado francés después de que ETA proclamara el alto el fuego permanente, el 22 de marzo.