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Gara > Idatzia > Kirolak > FUTBOL 2006--05-08
- Casas y Orbaiz, de penalti, remontaron en la segunda parte un partido que se puso muy cuesta arriba -
Se acaba la pesadilla y el Athletic seguirá un año más en Primera
·Con el triunfo la permanencia está asegurada matemáticamente

DEPORTIVO 1
ATHLETIC 2

BILBO

Se acabó. Por fin. Ha costado un enorme esfuerzo durante toda la temporada y ayer también. Sudor y lágrimas, con el sufrimiento siempre presente. La peor temporada de la historia del club se ha solventado en la penúltima jornada gracias a los errores de los rivales y a lo grande, con tres puntos de enorme valor. Los rojiblancos conocían desde antes de empezar el partido que con un empate estaba asegurada la permanencia. Especularon con el resultado y eso les pudo costar el partido, aunque se salvaron y eso era lo único importante.

El Athletic tuvo que volver a sudar de lo lindo para igualar el marcador primero y después remontar, pero al final un salvador Casas aseguró la permanencia con un remate de cabeza y luego Orbaiz transformó con frialdad el penalti.

Tristán se despedía del público de Riazor. Desde el pitido inicial se le vio motivado y casi nos amarga la noche. Los de Clemente también contribuyeron a que el Deportivo se creciera. Se metieron en su campo intentando defender el empate que necesitaban para lograr la permanencia y no duraron demasiado. Arizmendi adelantó a su equipo al aprovechar un mal despeje de Lafuente a un lanzamiento de Tristán.

Los primeros veinte minutos fueron un constante acoso sobre Lafuente que al final concluyó con el tanto del jugador cedido por el Atlético de Madrid. El Athletic cometió el error de meterse atrás y después tuvo que rectificar.

Ese gol hizo reaccionar a los rojiblancos, que hasta ese momento no dieron señales de vida en ataque y a partir de ese instante tuvieron que empezar a estirar líneas. Yeste se echó el equipo encima y con un centro chut suyo a punto estuvo de sorprender a Molina. El de Basauri comenzó a entrar en juego y el equipo lo notó. Tampoco fue para echar cohetes la mejoría, pero sirvió para que el Athletic se diera cuenta de que tenía posibilidades de hacer daño al Deportivo. La otra llegada que se puede contabilizar como de peligro vino en una falta que Yeste tiró muy desviada.

Había que jugársela. Los rojiblancos no querían dejarlo para la última jornada y Clemente dio entrada a Etxeberria para dar más fuerza al equipo en ataque. Casas se reubicó como lateral izquierdo, con Yeste por delante, y Etxeberria y Urzaiz como pareja de ataque.

Tras una falta en la que la peinada de Urzaiz no encontró rematador, el partido se embaló y al Athletic le pudieron salir caras las contras de las que disfrutó el Deportivo. Los roles habían cambiado por completo y ahora eran los gallegos los que se habían atrincherado en su propia parcela. Los rojiblancos querían, pero no podían. Les hacía falta la lucidez necesaria para crear ocasiones y no la encontraban.

La impotencia empezaba a apoderarse del conjunto bilbaino, que veía cómo iban pasando los minutos sin que apenas se acercaran a Molina. El juego a balón parado era lo único que les quedaba y así vino el empate. Al segundo córner consecutivo, Casas aprovechó el grave error defensivo de los gallegos para picar con maestría la pelota y rematar a las redes.

No aprendió de lo ocurrido una hora antes y tras igualar el partido volvió a ceder terreno. El Deportivo inició de nuevo una apuesta por buscar la portería, pero en esta ocasión los rojiblancos lograron salir indemnes con otro gol más a favor. Ahora toca disfrutar de la victoria y después ya habrá tiempo de pedir explicaciones y, sobre todo, aprender de los errores cometidos para que no vuelva a suceder. Como los que saltaron al campo al terminarse el partido, es tiempo de celebrar que el Athletic va a seguir un año más en Primera. Se ha pasado muy mal, aunque esto seguro que servirá para las próximas temporadas.

  DEPORTIVO. Joaquín Caparrós apostó por un equipo con un cariz más ofensivo que el rojiblanco alineando a cuatro jugadores de ataque como Munitis, Iago, Arizmendi y Tristán. El Athletic cedió la iniciativa y el control del juego desde el principio y el centro del campo gallego disfrutó de cierta tranquilidad a la hora de mover el balón.

 ATHLETIC. Tercera salida consecutiva en la que Clemente repitió la alineación. Tras cumplir su partido de sanción Casas regresó al once inicial y ocupó el hueco de Guerrero. Yeste volvió a contar con libertad de movimientos en la media punta.


 
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