SAOPAULO
La ola de violencia que hasta ahora ha dejado 155 muertos en Sao Paulo fue resultado de la difusión de declaraciones secretas en el Congreso, y que fueron filtradas por dinero a las prisiones, según informaron el miércoles fuentes legislativas brasileñas.
La nota añade que un empleado que presta servicios en la Cámara «fue procurado por la abogada de Marcos Williams Herbas Camacho, Marcola (jefe del grupo Primer Comando de la Capital, PCC) y vendió la cinta que, de inmediato, fue divulgada por audioconferencia en las penitenciarías de Sao Paulo». Las declaraciones se referían a planes para trasladar a 765 reos a prisiones de alta seguridad y a medidas concretas contra el PCC.
La Policía reconoció la muerte de 155 personas, pero el saldo se incrementó en la noche del miércoles tras nuevas acciones policiales que dejaron 22 muertos. También fueron quemados al menos diez autobuses.
Sergio Olimpo Gomes, de la Asociación de Oficiales de Policía, alertó al diario “O Globo” que los agentes seguirían la máxima del «ojo por ojo». «A partir de hoy morirá un promedio de 10 a 15 bandidos por día en Sao Paulo».
El gobierno del estado admitió haber contactado al jefe del PCC, Marcola, considerado promotor de los ataques desde la cárcel. Gomes señaló que si hubiera un acuerdo entre el gobierno de Sao Paulo y el PCC, «no se cumplirá porque 130.000 policías no lo respetarán».