- El Baskonia busca el triunfo definitivo en el Palau -
El Baskonia no quiere dilatar el pase a su sexta final consecutiva
·Desde la Final Four de Moscú ha llegado hasta el final en todos los torneos jugados
Jon ORMAZABAL
GASTEIZ
Dicen que llegar a la elite es mucho más fácil que mantenerse en ella, pero en esto también el Baskonia parece un club distinto, ya que esta tarde puede certificar, con un histórico 6-0 ante un Barcelona al que parece tenerle cogida la medida, el pase a su sexta final consecutiva en poco más de un año. Desde que en mayo del 2005 alcanzara el que parecía un techo irrepetible con su presencia en la Final Four de Moscú, el equipo gasteiztarra se ha acostumbrado a las finales y ha jugado todas las de los torneos en los que ha participado, la ACB 2004-2005, la Supercopa 2005, la Copa 2006 y la Final Four 2006 aquí no jugó el último partido pero estar en Praga es comparable a jugar una final.
Caprichos del destino, el damnificado en esta ocasión sería un Dusko Ivanovic que viviría en sus propias carnes esa máxima baskonista de que nadie es insustituible en este club. La fuga de enormes talentos como Nocioni, Calderón o Macijauskas no frenaron la progresión del Tau e, incapaz de transmitir a sus estrellas blaugranas la mentalidad ganadora de la que se retroalimentaron Baskonia e Ivanovic, el que muchos calificaron como auténtico y único valedor de los éxitos gasteiztarras, no encuentra la tecla para meterle mano un equipo ante el que ya ha tropezado cinco veces esta temporada.
Sin embargo, mal haría y traicionaría a su esencia el Baskonia en caso de pensar que el último paso será sencillo. El domingo el montenegrino ajustó mucho su defensa, logrando frenar la hasta ahora manifiesta superioridad interior baskonista y fue Roko Leni Ukic el que desestabilizó el partido, sacando partido de los cambios automáticos defensivos del equipo catalán.
En el plano deportivo,finalmente Dusko Ivanovic podrá contar con todos sus jugadores, aunque Williams y Marconato no estén en las mejores condiciones físicas. El base estadounidense sigue aquejado de una pubalgia desde el primer partido de la serie, mientras que el pívot italiano sufrió una rotura nasal el domingo en Zurbano al recibir un golpe en una pugna con Roko Leni Ukic.
En el Baskonia, además de Prigioni, baja por lo menos hasta el lunes, Erdogan ha pasado por un proceso febril, pero ya el martes entrenó con normalidad y podrá jugar en el Palau.
Ivanovic: «Tenemos que tener fe»
BARCELONA Dusko Ivanovic aprovechó la rueda de prensa previa al partido para espolear a los suyos y tratar de convencerles de sus opciones. «Tenemos que creer en nuestras posibilidades», manifestó Ivanovic, quien recordó que el Barcelona «no es un equipo que no sepa jugar a baloncesto». Además, el montenegrino aseguró que en el segundo encuentro disputado en Gasteiz, el domingo pasado, a sus jugadores sólo les faltó «algún pequeño detalle» para hacerse con el triunfo. En cualquier caso, no tuvo reparos en reconocer el buen juego del Baskonia y destacó la fortaleza del conjunto de Velimir Perasovic en el juego de transición. «Nosotros tenemos que cambiar la manera de defender y estar mucho más concentrados», señaló Ivanovic, quien se negó a plantear excusas como la duda de Denis Marconato, quien si juega lo deberá hacer con una máscara protectora a causa de la fractura nasal.
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