Son 26 los años. 26 los años que lleva en estos momentos en prisión. Toda una vida. Poco, apenas nada se sabe de el, de su día a día, de sus pensamientos. Es cierto que se habla mucho sobre los presos, no obstante siguen sin poder expresarse en libertad, cada vez mas aislados, con mas limitaciones.

No voy a hablar por él ni de él. Porque él es el protagonista y porque uno sigue sin poder expresarse con total libertad. No obstante, soy consciente que a pesar de no haberle visto en años me estoy tropezando día a día con Gatza.

Me lo encuentro en cada persona que sigue buscando 70 años después los restos de su familiar desaparecido, en la persona que trabaja por la dignidad y el reconocimiento de todas las víctimas olvidadas durante años, traicionadas, en la persona que se afana para llegar a que impere el reconocimiento de toda la verdad, impere la justicia y no el miedo o la imposición del silencio

Me lo encuentro en cada persona que reivindica su ser y existir como pueblo. en su derecho a poder decidir y organizar a todos los niveles su presente y futuro. Me lo encuentro en el vecino de Zornotza que de forma permanente ha mostrado su oposición a la imposición de una central térmica. Me lo encuentro en cada hombre y mujer que en cada pueblo de forma anónima están construyendo este país.

Lo mismo me lo encuentro en Alesbes como Ziburu, en Sestao como en Ataun, cuando no también en Palestina o en Chiapas

Me lo encuentro en cada hombre y mujer que está comprometido en la solidaridad con los represaliados y en la denuncia de las apuestas violentas. Me lo encuentro cada vez que me cruzo con cada familiar de cada represaliado, incansables en su testimonio, incombustibles en su compromiso, imprescindibles para la solución. Me lo encuentro en cada joven que reivindica, trabaja y que quiere ser protagonista del presente y del futuro. En el trabajo, en la organización de su tiempo, en el derecho a la vivienda. Me lo encuentro en cada mujer que trabaja por lograr el reconocimiento de su identidad. Me lo encuentro en cada persona que trabaja por derribar un sistema capitalista origen de la injusta distribución y sustituirlo por un orden social y económico alternativo que no admita ningún tipo de explotación.

Me lo encuentro... me lo encuentro en tantas personas y en tantas luchas que acaso sean la razón ultima por la que hoy todavía le mantienen en prisión. Es una prueba visible de que no existe una apuesta clara por abordar el conflicto, la prueba visible también de un fracaso colectivo por no haber sido capaces de hacer valer la voluntad de un país en torno a un tema como el de los presos.

Mientras llega nuestro día me seguiré encontrando contigo día a día y muy especialmente ayer, cuando me encuentre con determinadas perso- nas inconfundibles: tus familiares. -