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Batasuna se reúne con todos los partidos excepto con PP, UPN y UMP
·El objetivo de los encuentros es poner las bases de una mesa multipartita de diálogo
Los contactos entre las formaciones políticas vascas de cara a formar un foro multipartito se están produciendo sin cesar en las últimas semanas. En ese contexto, Batasuna ha mantenido conversaciones con formaciones de todo Euskal Herria, salvo el tándem PP-UPN y la UMP de Nicolas Sarkozy.
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GASTEIZ
El jueves y viernes de esta semana se proyectó públicamente la imagen de las reuniones de Batasuna con el PSEy con EA. Antes se supo del encuentro con el PNV que le costó una querella a Josu Jon Imaz. Pronto habrá también una cita pública con los jeltzales. Pero, según han manifestado fuentes de la formación independentista a este diario, en estas semanas Batasuna ha tenido o tendrá encuentros con todos los partidos del conjunto de Euskal Herria, salvo con PP, UPN y UMP.El listado de formaciones con las que Batasuna tiene abiertos canales de comunicación formales o informales son Elgar-Ensamble, UDF, Abertzaleen Batasuna, LCR, Les Verts, PNV, EA, Partido Socialista, EB, IUN y Aralar. El objetivo de todos estos encuentros de los que ya se han ido produciendo en las últimas semanas y de los que se realizarán en las próximas es acordar las bases para la formación de una mesa para la resolución del conflicto que englobe al conjunto del país. Se trata, por tanto, de ir asentando las bases sobre las que debe realizar su trabajo el futura foro multipartito. Desde la formación independentista se insiste en que después de que el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, anunciara la pasada semana el inicio de conversaciones entre su Ejecutivo y ETA, ahora corresponde a los agentes vascos poner en marcha el otro carril de negociación: la mesa de partidos.
No una reforma estatutaria
En cuanto a los contenidos de la mencionada mesa, algunos agentes han ido ya avanzando sus intenciones. El miércoles, el lehendakari, Juan José Ibarretxe, en nombre del Consejo Político formado en el seno del Gobierno tripartito, afirmaba que en la mesa se deben acordar las fórmulas para ejercer el derecho de la ciudadanía vasca a decidir su futuro. Al día siguiente, el PSE, por boca de su secretario general, Patxi López, señaló que su objetivo debe ser «ampliar los consensos con los que definir el marco de convivencia que permitan construir una Euskadi entre todos». En otros casos el PSEha concretado su propuesta en términos de reforma estatutaria.Desde Batasuna se sostiene que sus representantes no se van a sentar en una mesa para hablar de reformas estatutarias o del Amejoramiento. Fuentes de esta formación insisten en que uno de los frutos de la mesa de partidos tiene que ser un acuerdo sobre las raíces del conflicto esto es, el reconocimiento de Euskal Herria, la autodeterminación y la territorialidad que permita desatar entre todos estos nudos histó- ricos. Con esta base, el otro acuerdo debe darse sobre un marco de transición en el que todos los proyectos puedan ser posibles. En este sentido, inciden en que no se trata sólo de que todos los proyectos puedan ser defendidos, sino de que puedan ser también llevados a la práctica. Al tratar estas materias ya se han producido intensos debates en las últimas reuniones con el PSE.
Largo tiempo de relaciones
Fuentes de Batasuna consultadas recuerdan que las relaciones políticas con la mayoría de los partidos vienen ya de lejos, aunque con el fin del proceso de Lizarra-Garazi se produjo un paréntesis durante el cual los contactos estuvieron prácticamente congelados. La constitución del Foro de Debate Nacional y la declaración del Anaita- suna, realizada por la propia Mesa Nacional en otoño de 2003, hicieron que Batasuna volviera a tender puentes con otros partidos para retomar estas relaciones.Según detallan desde la formación independentista, la Iniciativa de Bergara, presentada en diciembre de 2003, también permitió a Batasuna multiplicar los contactos y reuniones. Aunque no dieron frutos de cara a las elecciones a las Cortes de 2004, permitieron restablecer cauces de comunicación.
Reconocimiento expreso
Fue también por esas fechas cuando según señalan textualmente desde la formación independentista «se abre una vía exploratoria entre Arnaldo Otegi y Pernando Barrena, por Batasuna, y Jesús Eguiguren y Francisco Ejea, por parte del PSE». Se retomaba así un cauce informal de contacto que había tenido unos tímidos inicios cuando Nicolás Redondo era secretario general del PSE y Joxe Mari Olarra formaba parte de la delegación abertzale.La izquierda abertzale ha reconocido el valor que ha tenido este canal de comunicación. El pasado jueves, tras la reunión oficial con Patxi López, Arnaldo Otegi quiso resaltar expresamente el trabajo de «sectores que, con valentía y por encima de las circunstancias y coyunturas, han sabido anteponer los intereses de la justicia y de la paz por encima de los intereses de sus propios partidos».
Anoeta, nuevo impulso
En opinión de Batasuna, los resultados de las elecciones del 14 de marzo de 2004, que expulsan al PPde la Moncloa, y la reflexión que para esas fechas ya había realizado la izquierda abertzale de cara a renovar su oferta política, abren un nuevo escenario para la búsqueda de soluciones.La propuesta de Anoeta hecha pública el 14 de noviembre de 2004 es contemplada por la propia izquierda abertzale como un nuevo hito en este proceso de conversaciones. En los días anteriores, las claves de la oferta habían sido ya esbozadas por Batasuna a los principales dirigentes políticos del país. En los meses posteriores se comenzaron a desarrollar reuniones casi de forma sistemática con PNV, PSE, EA y AB, y de forma más esporádica con EB, IUN, Elgar-Ensamble, LCR y Les Verts. La firma del Acuerdo Democrático de Base por parte de 55 agentes políticos, sociales y sindicales en torno al Aberri Eguna de 2005 contribuye, al entender de Batasuna, a centrar el eje del conflicto y favorece la extensión entre la ciudadanía de la idea de que es necesaria una mesa para la resolución democrática. En los encuentros que la formación abertzale mantiene con otros partidos durante 2005 y los que las otras fuerzas tienen entre sí sirven para que cada parte vaya presentando propuestas. Sin embargo, distintos acontecimientos impiden ir entrando en materia.
Obstáculo y acelerón
El anuncio del alto el fuego permanente de ETA, el 22 de marzo de 2006, parecía que abría el escenario que algunas fuerzas habían venido reclamando, pero la izquierda abertzale constata que, paradójicamente, se multiplican las agresiones contra ella, sobre todo desde el ámbito judicial.En este contexto, desde Batasuna señalan que la citación de ocho mahaikides a la Audiencia Nacional supuso «un gran golpe» al avance de las conversaciones. Así que la formación abertzale optó por un plante político con el objeto de acelerar dicho proceso de reuniones y negociaciones. Visto el discurrir de los acontecimientos desde entonces, Batasuna considera que se ha conseguido acelerar los acontecimientos, pese a que el PSOE «siga aferrándose a la excusa de la ilegalización para retrasar el momento de abordar el núcleo del proceso».
Un garante externo de lo acordado
En el guión de trabajo que Batasuna ha entregado a algunas de las formaciones, no sólo figuran sus propuestas sobre los objetivos de la mesa o sobre su configuración y metodología, sino que también se hace hincapié en la necesidad de contar con una mediación internacional. Según han señalado fuentes de la formación independentista, no se trata de forzar la imagen de una internacionalización del conflicto o pretender representar el proceso como una negociación entre dos naciones, sino que el objeto de esta mediación internacional sería que hubiera un fedatario externo de los acuerdos alcanzados en la mesa que ejerciera como figura garante de su cumplimiento por todas las partes. -
La mesa, para otoño y sin la ilegalización como obstáculo
GASTEIZ Batasuna, según las fuentes consultadas por GARA, se muestra optimista sobre cómo discurren las prenegociaciones para la constitución de la mesa de partidos. Por ello, desde esta formación señalan que si las cosas siguen bien, el foro multipartito debería estar ya en marcha para otoño, antes de que los distintos partidos políticos entren de lleno en la campaña de las próximas elecciones municipales y forales, previstas para mayo del año que viene. Esto exige, según su cálculo de plazos, una intensificación de las reuniones entre partidos durante las próximas semanas, exprimiendo al máximo las agendas de cada cual. Sin embargo, a nadie se le oculta que el Partido Socialista viene presentando públicamente la ilegalidad de Batasuna como un impedimento para abordar nuevos encuentros oficiales o de sentarse juntos en una mesa de partidos. Desde Batasuna se insiste en que «la ilegalización no debe ser un obstáculo para la puesta en marcha del foro multipartito». Se recuerda que este hecho no ha impedido que se haya podido desbrozar el camino seguido hasta ahora y consideran que presentarlo como condición tiene hoy menos sentido que nunca, después de que ya se haya producido el primer encuentro público entre Batasuna y el PSE y de que el Gobierno español haya anunciado que se va a reunir con ETA, que, apuntan irónicamente, no es una organización legal. A esto se añade el principio de que en cualquier proceso negociador «uno de los principales ‘compromisos’ de las partes es el reconocimiento del adversario, sin imposiciones y garantizándoles su derecho a la actividad política sin ningún tipo de coacción». Entienden además que «será el trascurso del proceso el que conlleve la eliminación de todos los mecanismos de agresión judicial y política contra la izquierda abertzale».
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