J.O.
GASTEIZ
Completadas las primeras pruebas físicas y médicas, el nuevo Deportivo Alavés realizará hoy su primer entrenamiento sobre el césped y lo hará sumido en un mar de dudas. Y es que, al actual puzzle albiazul le sobran varias piezas, otras tantas no quieren encajar en el modelo que les han presentado y muchas de las que hay no le sirven a Piterman para afrontar su tercer proyecto deportivo.
Está claro que el económico ha sido el factor decisivo en los primeros movimientos y, una vez que la gran capacidad negociadora del ucraniano haya servido para salvar la delicada situación económica Piterman prometió saldar todas las deudas en las fechas necesarias para que las denuncias a la AFE no generen disgustos toca crear un proyecto deportivo competitivo, una tarea que no va a resultar para nada sencillo. Primero, porque ha perdido a tres pilares importantes y muchos otros se empujan entre sí para abandonar la nave.
Los más de seis millones «generados» con los traspasos de Sarriegi, Bodipo y Costanzo permiten a Piterman tomarse las salidas de otras estrellas como Nené con calma y, desde esa posición de fuerza, puede esperar al mejor postor. Aunque Piterman lo consideró difícil, Nené abandonará probablemente la disciplina albiazul en breve y además de dinero, su salida puede dar algo de luz a la conformación de una plantilla con demasiados extracomunitarios. Brandán tiene una ficha asignada, Elton será cedido, Antchouet y Gentile esperan pronto un pasaporte y Wesley, del que Piterman espera bastante, está a expensas de lo que ocurra con el brasileño.
El único puesto que parece ya definitivamente conformado es la portería. Bonano y Ardouin serán los dos primeros porteros, con ayudas puntuales del filial, mientras Bernardo seguirá cedido en el Tenerife.